Ambos detenidos fueron arrestados previamente como autores de delitos de terrorismo y en la actualidad uno de ellos se hallaba sujeto a medidas de libertad vigilada, informa la Dirección General de la Guardia Civil.
La investigación, de casi tres años de duración, ha sido desarrollada por el Servicio de Información de la Guardia Civil, en colaboración con la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias, bajo la dirección de la Fiscalía y el Juzgado Central de Instrucción número 6 de la Audiencia Nacional, que ha ordenado el ingreso en prisión del detenido que estaba en libertad.
Las pesquisas se iniciaron tras la detección por parte de los profesionales penitenciarios de diversas pintadas y consignas relacionadas con la organización terrorista Dáesh en el centro penitenciario de Botafuegos de Algeciras.
A raíz de las mismas se detectó la existencia de un grupo organizado de internos dedicado a la radicalización y captación afín al ideario yihadista en dicha prisión, donde los detenidos habían estado cumpliendo condenas por la comisión de delitos relacionados con el terrorismo yihadista.
Uno de los detenidos ostentaba el rol de ascendencia sobre el resto de internos y las actividades de captación y adoctrinamiento que realizaba en prisión eran análogas a aquellas por las que fue previamente condenado y por las que cumple seis años de prisión, actualmente en la cárcel de Córdoba, a donde fue trasladado.
En el marco de su actividad proselitista en la prisión de Algeciras había reclutado al otro detenido, que se encontraba cumpliendo condena por un delito de autoadoctrinamiento terrorista y que se erigió igualmente en reclutador de otros internos.
Durante esta investigación se ha constatado la creación de una estructura dedicada al adoctrinamiento en la ideología y objetivos de Dáesh en el interior del centro penitenciario que pretendía mantener la cohesión de los internos ya condenados por terrorismo.
Esta operación tiene relación con otra realizada el pasado día 12 en Melilla en la que fue detenido un hombre que había coincidido con los anteriores y que en el momento del arresto se encontraba en libertad por cumplimiento de condena.
Esta acción coordinada de la Guardia Civil y la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias ya ha dado lugar a diferentes actuaciones como la llevada a cabo este mismo mes de marzo cuando fue desarticulado un grupo de internos cuyas actividades estaban dirigidas a la captación y radicalizaciónen en el entorno de las prisiones.