Así, reclamarán a la UE que “regule” esta situación o proceda a “erradicarla”. Antonio Muñoz, portavoz del colectivo ecologista en el Campo de Gibraltar, ha explicado que en la zona hay dos LIC solapados: el del Estrecho Oriental y el de la Red Natura 2000 de Gibraltar.
Ello conlleva la existencia de un plan de gestión que establece una serie de medidas para que no se produzcan episodios contaminantes ligados, fundamentalmente, a los accidentes de buques o a los “vertidos de carácter ilegal que se producen”. Según ha comentado, Verdemar ha observado que “cada vez se están acumulando muchos más buques en esa parte” en la que “en ocasiones están haciendo bunkering”, habiendo detectado “en muchas ocasiones” vertidos derivados de dicha actividad en las playas de levante de La Línea y la zona este del Alborán.
A ello, se añaden los “vertidos de residuos sólidos flotantes no biodegradables” que los buques realizan en la zona.Rechazo al fondeaderoSobre este aspecto, ha indicado que se están produciendo “amenazas e impactos” como la contaminación de la costa que está “afeando la zona turística desde el levante de La Línea hasta Sotogrande”, además de “amenazar” a especies protegidas como la tortuga boba o a los cetáceos, existiendo ya informes científicos que alertan de la “alta concentración de metales pesados en los tejidos de los cetáceos”.
Por ello, Verdemar va a solicitar a la UE y también a las autoridades españolas que “ordenen o erradiquen esta situación”, la cual han apuntado que “puede ser ilegal” en la medida de que estaría “infringiendo el reglamento y la Zona de Especial Conservación del LIC del Estrecho Oriental”. Por otra parte, el colectivo ecologista ha expresado su oposición al proyecto de la Autoridad Portuaria Bahía de Algeciras (APBA) consistente en una plataforma de uso portuario para fondeo de buques de “aproximadamente 20.000 hectáreas” desde La Línea de la Concepción hasta la Chullera, en Manilva (Málaga).
Según ha explicado, el proyecto, que está en información pública, comienza “después del LIC, sin invadirlo”, pero “va a sepultar completamente la zona turística de Sotogrande, Guadalquitón y todas las playas que hoy permanecen más o menos salvajes y que son parque natural”. Por ello, Muñoz ha indicado que también pondrán este asunto “en manos de la Unión Europea”, pues los planes de la APBA y las actividades que se desarrollan en las tres millas de LIC al este del Peñón suponen “un peligro para más de 40 kilómetros de costa”.