IAM/Redacción El concierto de Antonio Lizana en AlCultura fue un éxito en la noche del miércoles, 12 de julio, cuando el músico de San Fernando acudió a su cita con Algeciras para presentar “Oriente”, su tercer trabajo discográfico. (Foto concierto Jazz-Flamenco).
El disco, que está en la calle desde el pasado mes de marzo, fue interpretado por Lizana y sus músicos ante un auditorio cómplice y entregado, que superó todas las expectativas en cuanto a convocatoria, hasta el punto de que se agotaron todas las entradas tanto de la venta anticipada como de la venta en taquilla. Lizana interpretó también parte de su repertorio, con sonidos nuevos que vienen a enriquecer ese jazz-flamenco que le caracteriza desde sus inicios, y que ha provocado que las grandes autoridades del jazz y del flamenco de nuestro país se descubran ante este saxofonista, cantaor y creador de canciones.Los once temas de “Oriente”, el disco del que pudo disfrutar este miércoles el público de AlCultura, fue compuesto una vez que Lizana dejó atrás el centenar largo de actuaciones de la gira de su anterior álbum, “Quimeras del mar”. A Lizana le ha salido un disco abierto a nuevos sonidos, un paso adelante no solo en lo musical, sino también en su implicación social. “Fronteras”, el tema que abre el álbum, es el mejor ejemplo. “Fronteras pintadas al azar, el tiempo las volverá a borrar”, canta en el estribillo de una canción con reminiscencias árabes, pero sin perder, como en ninguna de sus canciones, el sello flamenco su voz como cantaor ni el dominio jazz que lideran los instrumentos de viento que él interpreta.Tal y como se pudo comprobar en Algeciras, los escenarios son el gran laboratorio de estilo de Lizana. Desde su debut discográfico en 2012 como Antonio Lizana con “De viento”, ha recorrido innumerables salas y festivales de jazz, ofreciendo siempre un directo que es más que un concierto; es un espectáculo vibrante y lleno de intensidad, que oscila de lo solemne a la fiesta, de la meditación al baile y de Cádiz a Nueva York. Su siguiente trabajo, “Quimeras del mar” (2015), fue un viaje a través del jazz guiado por la inspiración del flamenco, un álbum que afianzó ese jazz-flamenco que él eleva a la categoría de género. “Quimeras” fue la excusa perfecta para viajar de escenario en escenario. 104 actuaciones después, Lizana se despidió de la gira y al día siguiente se encerraba en el estudio para comenzar a trabajar en este “Oriente” con el que ahora regresa.Porque Antonio Lizana es, sobre todo, saxofonista. A los 10 años comenzó los estudios de este instrumento en el conservatorio de San Fernando (Cádiz), aunque pasarían algunos años hasta que tuviera sus primeros contactos con el jazz en varios seminarios del género impartidos por Jerry Berganza, Dick Oatts, Jim Snidero o Perico Sambeat. En 2011 finalizó los estudios superiores de Jazz en el centro Superior de música del País Vasco, donde nació su propio proyecto, Antonio Lizana Group. Galardonado con el premio Cádiz Joven en el campo del arte, como reconocimiento a su proyección, ha participado con la Afrodisian Orchestra de Miguel Blanco (Satierismos 2011), donde interviene como saxofonista, arreglista y cantaor.
Colabora también como cantaor y saxofonista con la Afro-latin-jazz Orchestra de Arturo O Farril, con sede en Nueva York, ganadora de un Grammy al mejor disco de latin-jazz instrumental. Con esta big band ha compartido escenario con los hermanos Andy y Jerry González, Dave Valentin, Papo Vázquez, Pablo Mayor, Cristina Pato, Ximo Tévar o Gregg Agust, entre otros.