IAM/Redacción Puerta de Feria para Galván que le ganó la partida a Morante y Manzanares Con poco más de media entrada se celebró el festejo que cerraba la feria taurina del 2015 con un cartel que había despertado la máxima expectación, que se tornó en decepción al fallar el pilar básico de la fiesta: EL TORO.Ftos Paco Gallardo
Y es que la ganadería de Núñez del Cuvillo que parecía volver por sus fueros, pegó un petardo en Las Palomas. Corrida muy terciada, con toros sin fuerza ni casta, justitos de kilos, algunos anovillados, otros sin recorrido, sosos en la embestida, y en definitiva y en su conjunto, una corrida sin sustancia.Fotos Paco Gallardo
MORANTE: sigue el de la Puebla sin entrar en Algeciras y así lleva Morante varios años. Dice Morante que “ se torea como se es y como se está”, y Las Palomas no ha tenido todavía la suerte de ver a Morante en toda su dimensión artística que es in cuestionable. Morante no estuvo en su primero, no se le vio, excepción las cuatro verónicas finales. El toro muy justo de todo se cayó sin tan siquiera bajarle la mano, y ahí se acabó todo. Pegó un sainete con la espada con seis pinchazos antes de acertar. El público lo respetó con su silencio. Tras un lío para parar al cuarto el público se enfadó con Morante por su pasividad, para tras ir al toro enjaretarlo cuatro chicuelinas de manos bajo que animaron al respetable que lo ovaciono. Con la muleta apareció Morante que encandiló al público con el toreo ralentizado marca de la casa que fue diluyendo con la falta de brío y transmisión del toro que se fue apagando, lo que Morante suplía con su torería y remates. Ya con zurda no fue lo mismo, cerrando con el arrebato de los ayudados. Pinchó antes de acertar y se le pidió la oreja pero sin fuerza: ovación y saludos.
MANZANARES: en su primero ante una birria de toro lanceo con su empaque habitual. Al colocar al animal en el caballo, fue el toro al bulto y sufrió el Alicantino una voltereta. Con la muleta destacó su toreo en redondo y tras el estoconazo habitual se le pidieron lasa dos orejas concediendo Mejias con buen criterio un sólo trofeo. El quinto paso ante la sosería del astado de la que se contagió Manzanares que hasta cosa rara en el, hasta pinchó, todo lo cual trasmitió indiferencia y hasta tedio a los graderíos que al final lo ovacionó.
GALVAN: con el mismo material o materia prima que las dos máximas figuras del toreo que formaban el cartel, el novel salía a hombros por la Puerta de Feria y los figurones a pie. Su secreto el de arrimarse y el de exprimirse y exprimir a sus dos toros, dando todo lo que lleva dentro que no es poco. Dos orejas cortó Galván al tercero, toro parado, sin recorrido, con el que armó una faena de arrimón que caló en el tendido, que se puso en pie ante los alardes de valor del isleño. Tiró muy bien Galván de la tarda embestida del nobilísimo toro, imponiéndose entre los pitones. SU firmeza impactó al público: dos orejas con fuerza.
Cerró un colorado que perdía las manos y cabeceaba y de nuevo la firmeza de un torero con mucho sitio, a gusto en la cara del toro en un nuevo arrimón pero con escaso enemigo pero vendiendo su tarea cortó su tercera oreja, proclamándose de largo el el triunfador.
LAS CUADRLLAS: Se desmonteraron saludando de Rafael Rosa y Blázquez en el segundo, que bregó muy bien Curro Javier. Asimismo saludaron tras banderillear los algecireños Álvaro Núñez y Rafael Limón en el tercero. González Araujo, en su Algeciras tuvo el honor de ir por delante banderilleando a su segundo. Curro Javier y Blázquez se desmonteraron en el quinto tras un gran tercio. A.R.