n rueda de prensa este jueves, el epidemiólogo ha resaltado que, al trabajar en el Ministerio de Sanidad, está en contra del tabaco: “Me parece bien que no se fume en ningún sitio nunca”. En este contexto, ha apuntado que la prohibición establecida por algunas comunidades autónomas tiene como objetivo fomentar el uso de mascarillas en la vía pública para reducir el riesgo de contagio.
“Son mecanismos para favorecer la aplicación de las medidas de precaución. Fumar en sí no es una práctica excesiva de riesgo, aunque los fumadores suelen tener más patologías respiratorias. No hay que entrar en mucha más discusión”, ha apuntado el epidemiólogo, añadiendo que “si hay que homogeneizar” la ley a nivel nacional, “se valora y se homogeneiza”. “Ahora mismo hay una Ley Antitabaco muy constriñente, pero si hay que hacer alguna actividad más se valorará”, ha agregado.
Comunidades como Asturias, Cantabria, Castilla y León, Castilla la Mancha o Valencia han confirmado en los últimos días que estudian la posibilidad de implantar esta medida, tras el anuncio por parte del presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo; mientras que Madrid, también a favor, ya analizó hace algunas semanas la viabilidad de la norma.
En Aragón, según han explicado fuentes de su Gobierno, no se descarta aplicarlo y en Baleares está “encima de la mesa”. Andalucía, por su parte, ha anunciado la puesta en marcha de un estudio para analizar la influencia del humo de tabaco como ‘vector’ del coronavirus y sopesar su prohibición.