La sala de Lo Penal sección 1 de la Audiencia Nacional, con la conformidad de todas las partes, ha acordado la apertura de juicio oral contra Yassin Kanjaa por la presunta comisión de un delito de asesinato terrorista yihadista contra Diego Valencia, sacristán de La Palma de Algeciras, y a su vez por un delito de lesiones de carácter terrorista yihadista contra el sacerdote salesiano Antonio Rodríguez, ya fallecido por causas naturales.
El asesino confeso de Diego Valencia se enfrenta a prisión permanente revisable por el primer supuesto y a una pena de hasta quince años de prisión, por el segundo. El auto, firmado el pasado jueves, recoge que todas las partes, desde el Ministerio Público a las acusaciones particulares y la defensa del detenido, se muestran conformes por este trámite. Ahora, habrá que esperar a que la Fiscalía eleve sus calificaciones provisionales. La defensa del yihadista, presumiblemente, intentará desactivar el supuesto de terrorismo que pesa
El auto, firmado este jueves, indica que todas las partes, incluida la defensa del procesado, han mostrado su conformidad con la conclusión del sumario y tanto el Ministerio Fiscal como las acusaciones han solicitado la apertura de juicio oral contra el mismo, concediendo un plazo de cinco días al Ministerio Fiscal para calificación provisional, sin que ello implique por parte de la defensa conformidad con la tramitación del procedimiento y la competencia de la Audiencia Nacional.
Cabe recordar que el magistrado Joaquín Elías Gadea Francés, juez de refuerzo del Juzgado Central de Instrucción nº 6 de la Audiencia Nacional, acordó la conclusión del sumario después de que Kanjaa rechazar el auto de procesamiento.
El magistrado determinó que los hechos imputados fueron constitutivos de delitos de terrorismo, de acuerdo a los atestados e informes policiales y periciales y a la información que se recabó durante meses de investigación.
Asimismo, concluyó que la alteración psíquica del acusado cuando llevó a cabo el ataque afecta, en todo caso, al alcance de la culpabilidad, pero no a la calificación de los hechos como terroristas, fundamental para la solicitud de prisión permanente revisable.
Finalmente, sostuvo que el ataque mortal fue premeditado por las conversaciones mantenidas por Whatsapp por su madre, y la radicalización religiosa adquirida en las semanas previas a los hechos.
Kanjaa permanece en prisión provisional sin fianza desde el 30 de enero de 2023.
