Los hechos se han producido este martes, cuando el centro procedía a la vuelta a la actividad lectiva tras el verano. Alrededor de las 12.00 horas, se produjo un corte en el suministro eléctrico que obligaba a la suspensión de toda actividad.
El motivo era que, en ese preciso instante, habían entrado en el centro para robar el cobre del cableado eléctrico.
La luz se fue apagando por fases y desde el centro comprobaron que no se trataba de un corte zona, ya que las viviendas adyacentes sí tenían suministro.
El centro trató sin éxito de que desde Endesa se diera una respuesta al problema, por lo que finalmente este miércoles han sido técnicos de la empresa Dielectric los que han procedido a la reposición de la instalación eléctrica, con el objetivo de que mañana jueves se puedan reanudar las clases.
