El buque, con bandera de Malta, cuenta con una tripulación de nueve personas que se realizaron un test rápido, dando la mayoría dio positivo, por lo que el armador puso los hechos en conocimiento de Sanidad Exterior.
Ante esta situación, Sanidad Exterior ha decidido practicar pruebas PCR a toda la tripulación e inmovilizar el buque hasta tener los resultados de los test, por lo que la tripulación permanece de momento aislada en el interior del barco en cuarentena.