Hará año y medio se presentó una denuncia ante la comisaría central de la Policía Nacional de Algeciras que despertó el interés en los miembros de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV). El denunciante días más tardes fue a testificar facilitando los datos de los supuestos implicados en una trama dedicada a estafar a clientes de entidades bancarias, dicho testimonio facilitó a la Policía la identificación de los responsables de la red, llegando incluso a ponerles cara.
La banda criminal se inició con tres perfiles: El primero el responsable de crear el cebo para que los peces picaran, rol llevado a cabo por dos ciudadanos marroquíes residentes en su país, ambos expulsados de España por antecedentes penales, siendo los dos únicos miembros de la banda sin detener a día de hoy.
El resto de la red criminal, estaba formada por veinte personas residentes en Algeciras, siendo especial la función de dos españoles y un marroquí con el rol de intermediarios, y el resto lo componía las llamadas mulas, personas de paja, que ganaban una comisión del porcentaje estafado. La misión de éstas era abrir las cuentas a su nombre donde se transferirías el dinero estafado, una vez extraídas las claves secretas de los peces.
Pero en el caco del joven que se presentó a denunciar, resultó ser uno de los compinches que traicionaban a quienes eran sus compañeros de estafa. Así la Policía focalizó en detectar al resto de los miembros de la banda. El rastreo que enviaban a través de MoneyGram, facilitó el rastreo hasta los que residen en Marruecos, cerrando así la Policía el círculo.
La veintena de detenidos fue por supuestos delitos de blanqueo de capitales, estafa y asociación criminal, siendo la mayoría de fácil localización ya que estaban en la órbita de la policía, arrestados en prisión ya que cumplían condena por otros delitos.
La UDEV están satisfechos, pero con un amargo sabor de boca ya que la juez de guardia el día de las detenciones decretó la libertad con fianza de los implicados a pesar de la opinión contraria de la Fiscalía. La investigación policial seguirá su curso pero ésta pasará a la Audiencia Nacional, al inhibirse la juez instructora del Juzgado nº 1 de Algeciras, ya que muchos de los afectados por este delito se encuentras extendidos por varias provincias.