Uno de los jóvenes va grabando toda la travesía, unas imágenes en las que se observa que el mar está algo agitado y el único objeto que les permite flotar es una pequeña colchoneta.
Casi al final del vídeo se puede apreciar a uno de los jóvenes y justo detrás de él cómo se asoma una aleta de lo que parece ser un tiburón gris.
El vídeo está circulando por las redes sociales y muestra una vez más el lado más dramático y duro de la inmigración.