Este mamífero marino avistado en agosto de 2016 se debe a más de 10 años de una suerte de ‘adopción’ de una hembra de delfín mular por manadas de delfines comunes en la Bahía. Las tentativas de apareamiento de machos de delfín común con la mular ‘adoptada’ han sido frecuentes durante años y el resultado ha sido la fecundación de la hembra de delfín mular con el resultado que ya se conoce.
No se trata de una nueva especie de delfín, pero sí de una situación de hibridación anormal y atípica, producto de un forzamiento reiterado de relaciones sexuales entre dos especies que apenas se relacionan en la naturaleza pero que ha sido propiciada por la situación inédita de adopción, mantenida en el tiempo, explica el director de esta investigación y catedrático de la Universidad de Sevilla, José Carlos García.
La Bahía de Algeciras es uno de los enclaves en España más importantes, sensibles y vulnerables para la observación controlada cerca de la costa de delfines comunes y listados (periódicamente, de delfines mulares), especialmente porque es zona de reproducción, cría y alimentación. Ello requiere de un plan de protección, vigilancia y conservación específico del lugar. La Bahía, por otra parte, está muy antropizada y existe mucho riesgo de colisión con los delfines y sus crías de embarcaciones deportivas y motos acuáticas.
Estos estudios se han desarrollado también con la colaboración del Área de Investigación I+D+i del Acuario de Sevilla y la empresa de Gibraltar, Dolphin Adventure. (Fuente: UCC+i US)