La Policía Nacional ha culminado una investigación llevada a cabo en Algeciras sobre varios delitos de extorsiones, amenazas y lesiones cometidos por una pareja de prestamistas perfectamente organizada.
La denominada Operación Aníbal ha finalizado después de más de siete meses de trabajo con la detención de esta pareja que captaban a personas vulnerables para que dependieran económicamente de sus servicios, y en muchos casos sufragaban la adicción de estas personas a sustancias estupefacientes para después extorsionarlos.
La Operación liderada por el grupo de UDEV I de la Comisaría de Algeciras comenzó con la detención de una mujer que había propinado una brutal paliza a dos varones con el fin de recuperar el dinero gastado por estos en el consumo de sustancias estupefacientes.
Ante las sospechas de que la detenida y su pareja pudieran estar extorsionando a personas vulnerables, se establecieron dispositivos de vigilancia sobre ellos, en los cuales se pudo comprobar como sacaban dinero de madrugada con las tarjetas bancarias y cartillas aprovechando su situación de marginalidad y desamparo.
Los investigadores encontraron muy poca colaboración por parte de las víctimas a causa del miedo que sufrían, por la desesperación económica de no disponer de sus documentos bancarios para poder cobrar sus pensiones o sus pagas extras, y aterrorizados por las lesiones que podrían sufrir en caso de colaborar con la policía.
La Policía llegó a la conclusión que la pareja de prestamistas abusaba de la situación de sus víctimas a las que en algún momento prestó dinero y que, posteriormente, les reclamaba con un interés desorbitado, más del 100%, e incluso como ocurría en la mayoría de los casos, retirando de manera arbitraria la cantidad que ellos deseaban con sus tarjetas bancarias, retenidas en señal de garantía, precedidas de coacciones, amenazas e incluso contundentes agresiones.
En el cauce de la investigación se detuvo a uno de los autores mientras entraba en una cafetería a cobrar una deuda que superaba los dos mil euros a una de sus víctimas. El detenido llevaba entre sus pertenencias varias tarjetas bancarias de diferentes entidades a nombre de diferentes titulares, así como un papel manuscrito con un usuario y una contraseña.
Ante los indicios encontrados, se procedió a realizar una entrada y registro en el domicilio de uno de los arrestados, encontrándose en el mismo una caja fuerte encastrada en la pared detrás de un cuadro con 28 documentos de todo tipo, diferentes titulares de tarjetas bancarias, documentos de identidad, papeles manuscritos con contraseñas de tarjetas de crédito de los deudores con sus nombre y entidades financieras.
Los detenidos han pasado a disposición del Juzgado de Instrucción 2 de Algeciras. Hay otras dos personas implicadas en los hechos
Un comentario
Que policía nacional y guardia civil tan eficaz pero que pena que las leyes estén en el polo opuesto. Estos elementos seguro que ya están campando a sus anchas y llamando a sus compinches para que vengan.