Un dron que volaba hacia el centro penitenciario de Botafuegos en Algeciras el pasado martes terminó cayendo sobre la terraza de un vecino de la localidad. En su interior llevaba hachís, cocaína y dos teléfonos. No consiguió alcanzar su destino porque perdió el control durante el trayecto, impactando sobre la terraza.
Desde el sindicato ACAIP- UGT denuncian este nuevo intento de introducir objetos en las cárceles españolas utilizando drones. Advierten que «las prisiones españolas no cuentan con sistemas antidrones y que de forma exponencial en el último año se han incrementado los avistamientos en las cárceles». También sostienen que «se están incautando aparatos aéreos portadores de drogas y teléfonos, y que existe alta probabilidad de que se puedan introducir armas de fuego, exponiéndose gravemente la vida de todas las personas que trabajan y viven entre los muros de una prisión».
El impacto del dron sobre la terraza de un vecino de Algeciras no es un hecho aislado. La Policía Nacional, hace unos días, detuvo a tres personas que se encontraban en el interior de un coche cercano a los centros penitenciaros de Puerto 1 y 2 de Cádiz. Tras su registro, intervinieron un dron que llevaba adosado un teléfono móvil de alta gama y dos botellas de whisky.