En el comunicado, la parroquia explica que para preservar la seguridad de los fieles y del resto de empleados se ha procedido a cancelar los cultos y todas las actividades parroquiales. Una vez que se realicen las correspondientes pruebas médicas a los contactos estrechos del empleado afectado y los resultados sean satisfactorios, el templo volverá a retomar su actividad habitual.