En declaraciones al programa de Antena 3 ‘Espejo público’, Moreno ha señalado que Granada, a pesar del cierre perimetral y de las medidas restrictivas de movilidad y del toque de queda nocturno de 23.00 horas a 6.00 horas, tiene una cifras “alarmantes de aumento” de contagios por coronavirus y tampoco evoluciona bien Jaén, donde, junto con Sevilla, la Junta implantó desde el pasado viernes cierres perimetrales, entre otras limitaciones.
Ha recordado que el 8 de noviembre decae el toque de queda, recogido en el estado de alarma decretado por el gobierno, por lo que la Junta se da de margen hasta esa fecha para decidir, en función de la evolución y de si las medidas ya adoptadas surten efectos, aplicar otras más restrictivas o, en el caso de que “haya luces en el horizonte”, mantenerlas más tiempo.
Aunque “no se descarta ningún escenario”, ha insistido en el que el confinamiento domiciliario es el “último recurso” porque se infringe un “duro castigo” económico a sectores de la hostelería, del turismo y de la cultura, entre otros y, en este sentido, ha indicado que la tasa de paro en Andalucía superaría ampliamente el treinta por ciento de la población activa, por lo que ha reiterado que es la “última opción”.
No obstante, Moreno ha admitido que se están “agotando los recursos” para frenar los contagios, si bien ha explicado que otras opciones son adelantar a horas más tempranas las restricciones de movilidad y el cierre de la hostelería, que ahora tiene la obligación de cerrar a las 22.30 horas.
Para el presidente de la Junta de Andalucía es “incomprensible” que el gobierno de la nación haya decretado un amplio estado de alarma hasta mayo y no haya previsto el escenario del confinamiento domiciliario, en el que las comunidades autónomas no tienen competencias, por lo que le ha recomendado que tenga ya previsto esa opción porque, “si hay que cerrar, que se cierre cuanto antes para salvar la Navidad”.
En este sentido, Juanma Moreno ha advertido de que si “llegamos tarde no salvamos ni la navidad ni la economía”.