En rueda de prensa este jueves, el epidemiólogo ha informado de que, en estos momentos, están ocupadas 3.212 camas convencionales de hospital y 383 de Unidades de Cuidados Intensivos (UCI), lo que supone un índice del “3 por ciento del total de camas”. Sin embargo, hay casi 600 camas ocupadas más que el pasado jueves (2.747) y 100 más en UCI (292). Por comunidades autónomas, en estos momentos hay 1.000 hospitalizados en Madrid, 892 en Cataluña y 393 en Aragón.
“Ahora mismo no hay un riesgo inminente de colapso, ni muchísimo menos. El COVID-19 ahora mismo no está en riesgo de colapsar el sistema, absolutamente de ninguna manera”, ha defendido rotundamente Simón, aunque ha reconocido que “es cierto que en algunos puntos concretos ha habido una presión superior”, como en algunos hospitales de Aragón, Lleida o Madrid, donde “también está subiendo la ocupación hospitalaria pero no se está poniendo en jaque el sistema”.
Simón ha argumentado que “no se está notificando ahora mismo una situación de alto riesgo”, pero ha admitido que “dos o tres hospitales de Madrid tienen una situación más peligrosa”. “Son llamadas de atención, tenemos que actuar, toda la población y todos los sistemas sanitarios, para mantener la tensión”, ha comentado. Sin embargo, ha reconocido que Madrid “es una de las comunidades” en la que más se tiene que centrar la atención ahora, “como anteriormente Cataluña y Aragón”.
“QUE LO LLAMEMOS ‘SEGUNDA OLA’ ES UNA CUESTIÓN SEMÁNTICA”
Por otra parte, ha calificado la subida de casos de este jueves, de casi 1.300 frente a ayer, como “suave”, y ha argumentado que “permite la implementación de medidas de control mucho más seria y controlada”. Por ello, no ha tildado de ‘segunda ola’ la situación actual. “No sabemos exactamente cómo tenemos que definirla, ahora mismo hay un incremento de casos, que lo llamemos ‘segunda ola’ es más bien una cuestión semántica”, ha insistido.
Por ello, ha instado a “no buscar un término que genere más ansiedad de la cuenta” a la población. “Podría ser o podría no ser una ‘segunda ola’. Hasta ahora, todo se está controlando en las zonas donde está habiendo un incremento. No tiene absolutamente nada que ver con lo que vimos en marzo o abril, pero tenemos que seguir a alerta, hay un riesgo importante”, ha alertado. Sobre si existe transmisión comunitaria, ha aceptado su presencia, pero ha puntualizado que “no es tan importante como pueden hacer parecer las cifras”.
Al respecto, ha reivindicado la estabilización en Aragón y Cataluña, lo que a su juicio demuestra que “si se aplican las medidas disponibles con contundencia un brote se puede controlar”. “Lo que se ha hecho en Cataluña y Aragón puede servir de ejemplo para otros territorios. Ha sido un éxito relativo, se ha demostrado que el brote se puede controlar. Son comunidades en las que muchas se pueden mirar. El problema que tuvieron es que fueron las primeras que empezaron a detectar situaciones que no se habían detectado”, ha destacado.
Sobre la situación concreta en Aragón, ha aplaudido que “está evolucionando muy favorablemente”. “Puede haber subidas y bajadas. En barrios concretos de Zaragoza o en puntos concretos del territorio puede seguir habiendo transmisión pero la tendencia es muy favorable”, ha celebrado, añadiendo que el porcentaje de asintomáticos en toda España continúa siendo “muy alto”, por encima del 50 por ciento.
Simón ha informado de que esta semana se han detectado en torno a 95.000 casos sospechosos de COVID-19, en comparación con los 40.000 “de hace pocas semanas”. Según el epidemiólogo, se está realizando prueba PCR a más del 90 por ciento de los sospechosos. Igualmente, ha resaltado que en torno al 35 por ciento de los positivos tiene contactos conocidos, por lo que está controlado su origen. “Entre el 60 y el 70 por ciento de los positivos son asintomáticos o tienen contacto conocido, y entre el cinco y diez por ciento son importados”, ha agregado.