“La mejor manera de aplicar el distanciamiento social necesario para ralentizar la propagación es pasar a un estado de confinamiento social total”, ha explicado el ministro principal gibraltareño, Fabian Picardo, en un comunicado del gobierno gibraltareño.
La medida ha sido adoptada en una reunión del Consejo de Ministros en la cual ha participado el líder de la oposición, Keith Azopardi. Así, los supermercados, las tiendas de alimentación y farmacias permanecerán abiertas. El resto de comercios cerrarán.
Además, Picardo ha emplazado al resto de trabajadores a trabajar desde casa, aunque si deben acudir a su centro de trabajo, deberán respetar las normas del distanciamiento social. Los restaurantes podrán servir comida a domicilio.
Gibraltar sigue así la polémica estrategia del Gobierno británico, que espera conseguir lo antes posible una inmunización de grupo sin recurrir a confinamientos. “El aumento del número de infecciones detectadas no representa un fracaso. El fracaso será el aumento innecesario en el número de muertes”, ha subrayado Picardo.
