CSIF ha recibido las quejas de varias decenas de afiliados denunciando sus casos en las últimas semanas, pues se está poniendo en riesgo su propia recuperación y, al mismo tiempo, perjudica tanto a los compañeros como al servicio esencial que prestan a la ciudadanía. Además, el sindicato tiene constancia de que el número de afectados es mucho mayor, aunque no se pueda cuantificar, pues la Administración no aporta datos sobre este asunto.
Así, CSIF presentó ayer un escrito de denuncia ante la Unidad de Valoración Médica, dependiente de la Delegación territorial de la Consejería de Salud en Cádiz, por vulnerar los derechos de los trabajadores, sobre todo, los relativos a la protección de la salud y de prevención de riesgos laborales. De esta manera, exige a la Delegación que revoque de forma inmediata todas aquellas altas que no han sido valoradas adecuadamente.
Estas altas se están llevando a cabo a personal de todas las categorías profesionales, en todos los hospitales y distritos de Atención Primaria de la provincia, independientemente si son casos relacionados con Covid-19 (de baja por ser personal de alto riesgo ante posibles contagios) o por otras patologías (embarazos, bronquitis, cuadros de ansiedad, dolores crónicos, indicios de tumoración, en otros casos). Y todos ellos, sin pasar por un reconocimiento médico y sin que se compruebe si persisten las causas que motivaron sus bajas laborales. De hecho, los profesionales afectados están siendo informados del alta mediante mensaje de texto al teléfono móvil o con informe del alta remitido a su propio médico.
CSIF no logra entender la motivación de la administración sanitaria para proceder de esta manera, sin velar por la seguridad y la salud de los profesionales de la sanidad pública. La coincidencia en el tiempo y el elevado número de altas que se están registrando hacen difícilmente justificable que éstas se deban a criterios puramente clínicos.