Paco de Lucía reaparece tras tres años de ausencia en su retiro en una playa del Yucatán

IAM/EP

De entonces nos quedó el que hasta la fecha es su último disco, grabado en directo. Recién llegado de Odessa, Ucrania, donde actuó este pasado jueves, toma parte este domingo, 16 de junio, en el Guitar Festival de Barcelona. Le espera en julio otro certamen, el Festival de Flamenco y Fados Badassom, en Badajoz, que le devolverá recuerdos maternos, pues hijo de portuguesa, apreció siempre la música popular del vecino país. Mas sin duda, entre otros eventos, resalta su participación en la clausura del Festival Internacional de Música y Danza de Granada, que se inaugura el próximo día 21 hasta el 12 de julio. En esa última fecha, su guitarra sonará en un lugar de extraordinaria belleza: el teatro del Generalife. El 15 de agosto tomará parte en el muy publicitado Starlite Festival de Marbella.Paco de Lucía habitaba un bonito chalé en el madrileño barrio residencial de Mirasierra, al norte de la capital. Eran los años 70, cuando compartía el hogar familiar con Casilda Varela y sus tres hijos (dos chicas y un varón). Pero Paco vivía siempre a salto de mata por sus constantes desplazamientos. Y el matrimonio se fue al garete. Con el nuevo siglo habitó en una vivienda en Toledo. Pero acabaría radicándose en México, en la península del Yucatán. Había conocido hace treinta años un pequeño paraíso semidesierto, la Playa del Carmen, y acabó comprándose una vivienda rústica donde ha sido muy feliz en estos últimos años. “Sin obligaciones del reloj, sin preocuparme de la guitarra”.A Paco le ha gustado siempre pescar, que no en vano es de Algeciras, donde vino al mundo el 21 de diciembre de 1947. La pesca submarina es una de sus grandes pasiones. Cuenta que pesca para comer. Lo justo. La cesta del día. Porque le chifla el pescado como buen gaditano. En aquellos lejanos parajes, de salvaje exotismo, ha conocido el descanso, la felicidad, compartiendo su vida con una nueva pareja. Se procuró un pequeño estudio en lo alto de un torreón. Y allí surgió un disco precioso: Cositas buenas. Y, cómo no, desde el Yucatán se ha desplazado para sus giras por Europa y América. Porque, pese a sus prolongados descansos, su nombre de excelso guitarrista internacional no ha bajado de cotización.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *