Pintor, escenógrafo, diseñador y ceramista, es considerado como una de las primeras figuras de la pintura española de los años setenta y ochenta. Nació el 5 de mayo de 1931 en Algeciras, ciudad en la que pasó parte de su infancia, ubicándose la vivienda familiar en la calle Tarifa
Desde temprana edad mostró interés y aptitudes hacia la creación artística. Su formación la inició en Jerez, en la Escuela de Artes y Oficios de Manuel Romero, donde formó parte del primer grupo artístico, junto a los pintores Carlos Ayala, Joaquín Cañete y Jesús González, miembros todos de una importante generación de creadores andaluces. Posteriormente, estudió en la Escuela de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría (Sevilla) y, de 1952 a 1957, cursó sus estudios en la Academia de Bellas Artes de San Fernando (Madrid), donde compartió aula con Eduardo Sanz, Alfredo Alcaín, Antonio Zarco, Isabel Villar y César Olmos.
Su llegada a la capital significó la consolidación de su formación y de su personalidad, allí, en 1958 celebró su primera exposición en la galería Clan y, poco después, en la galería Jardín de Barcelona. Ese mismo año participó en la exposición colectiva Arte español de Vanguardia en el Club Urbis de la capital española y fue elegido para participar en la XXIX Bienal de Venecia, una de las más antiguas, importantes y prestigiosas exposiciones internacionales de arte contemporáneo del mundo.
En esta época se inició una colaboración con la firma española Loewe, llegando a convertirse en el alma creativa de la firma, creando su famoso anagrama, además de frascos y trabajos minimalistas de líneas puras y acabados perfectos.
Por su parte, Amparo Vela ha dado las gracias al Ayuntamiento y ha explicado que se siente agradecida y honrada porque gracias a este protocolo a partir de ahora todos los algecireños podrán disfrutar del arte de su hermano.
Pintor ha manifestado la importancia de que nuestra ciudad cuente con obras de gran calidad artística factura de Vicente Vela, artista que vuelve a la tierra que le vio nacer a través de su propia creación.
Finalmente, Landaluce ha dado las gracias a la familia Vela y ha puesto en valor este tipo de gestos que engrandecen a la ciudad y ayuda a que Algeciras se consolide como una ciudad donde la cultura y la historia caminan de la mano, aumentando el patrimonio de la ciudad y ofreciendo una imagen en positivo de la ciudad de la bella bahia.