Un colectivo de trabajadores perteneciente a la filial de Maersk Comesa Star Containers ha decidido, tras cinco años de infructuosa negociación de su convenio colectivo, iniciar un proceso de protestas públicas en el que desean llamar la atención sobre lo que entienden como “una forma inmoral de subyugar a quien no cuenta con unas armas efectivas con las que hacer valer sus derechos”.
Los trabajadores, muchos de los cuales afirman tener 20 o más años de antigüedad en la compañía, denuncian “la deslocalización de los recursos humanos, el cambio de nombre de la empresa, la falta de interés por parte de la compañía por la reparación de contenedores dejando la actividad morir lentamente, y un lñargo etcétera”. Los empleados piden, en este sentido, “el respeto” a sus derechos “adquiridos y reflejados en la cláusula de garantía de empleo que se reconoció en su día por parte de Maersk”.
En asamblea, y con la asistencia de representantes de los sindicatos CCOO y UGT, han decidido realizar un paro de tres horas, a partir del próximo 2 de junio, a las 12.00 horas, “durante las cuales se realizará una corta marcha simbólica hasta la puerta principal de APM Terminals”, donde después de entregar un escrito dirigido al director general, Andres Kjeldsen, se darán por terminadas las protestas.