La Junta Directiva del Algeciras CF ha dimitido en pleno. No era una sorpresa. Desde mediados de la pasada semana, cuando el club hizo pública la intención de sus mandatarios, se esperaba uin milagro que hiciese cambiar de opinión a Bernardo Martín y los suyos, pero ese momento no ha llegado.
Eran aproximadamente las 21.30 horas cuando los integrantes de la junta directiva se levantaban de la mesa en el auditorio Millán Picazo, donde se estaba celebrando una Asamblea Extraordinaria para dar cuenta de la situación límite que vive el club. Bernardo Martín se quedó el último. Quizás interiormente no quería hacerlo, pero finalmente ocupó su lugar entre los demás socios, con lágrimas en los ojos, y no sin antes recibir una calurosa ovación por parte de los 82 asistentes a la asamblea.
Si bien el reconocimiento de la labor llevada a cabo por Martín y los demás representantes de la directiva es unánime, había profundas discrepancias entre los socios acerca de la idoneidad de dejar el barco a seis jornadas del final de temporada, y con una deuda que alcanza los 196.361 euros. “Muchos de nosotros estaríamos dispuestos a salir ahí para formar parte de la Junta Gestora, pero nos faltan los conocimientos para afrontar los problemas cotidianos del club”, proclamaba uno de los socios. Había, también, algunos miembros de las antiguas juntas directivas del club. Ni uno sólo de ellos aceptó el reto, y la sesión permaneció paralizada durante casi una hora a la espera de que se completase el equipo directivo provisional.
Finalmente, cinco socios del club (Francisco Javier Judiel Guerrero, Javier Correa, Francisco Javier Gomes, Martín Gil Ruiz y Raul Torres Vázquez, se unirán al secretario, José Álvarez, para regir los destinos del Algeciras de manera provisional, hasta que se convoquen de nuevo elecciones.