IAM/Redacción El Gobierno de Gibraltar ha denunciado este lunes que un avión militar español dedicado a patrulla marítima obligó a desviarse y causó retrasos en el aterrizaje de un vuelo de la compañía British Airways el pasado viernes.
Según el relato del Gobierno del Peñón, un Lockheed P3 Orion del Ejército del Aire español de cuatro motores y dedicado a tareas de patrulla marítima y antisubmarinos obstaculizó la trayectoria del vuelo de British Airways BA490 procedente de Londres Heathrow.
El problema surgió, según el Ejecutivo de Fabián Picardo, cuando el avión español, que volaba por delante del de BA por el Estrecho según el aviso de la Torre de Control de Sevilla, cambió repentinamente su rumbo en dirección contraria. Esto obligó a la Torre de Control de Gibraltar (Gibraltar Air Traffic Control, ATC) a dar instrucciones de modificación de la maniobra al vuelo de British Airways ante la necesidad de mantener una distancia de seguridad entre los dos aparatos.
El Gobierno de Gibraltar entiende que el avión español se puso en contacto con el control gibraltareño y aclaró su intención, tras lo cual, el avión de BA obtuvo permiso para aterrizar. Asimismo, se ha informado al Gobierno de que en todo momento se respetó la distancia de seguridad entre las dos aeronaves”, concreta el Gobierno gibraltareño en un comunicado.
En cualquier caso, el Ejecutivo del Peñón espera recibir un informe completo sobre el incidente para aclarar si el avión militar español realizó una incursión en el espacio aéreo sobre las Aguas Territoriales Británicas de Gibraltar.
España sostiene que las aguas que rodean Gibraltar sí son españolas pues por el Tratado de Utrecht de 1713 solo cedió a la Corona británica el castillo y la ciudad de Gibraltar, junto a su puerto, defensas y fortalezas, no así el istmo –ocupado por los ingleses en el siglo XIX– ni las aguas circundantes ni el espacio aéreo.
Para el Gobierno que dirige Fabian Picardo resulta “contradictorio” que el Ejecutivo español abogue por retomar el diálogo con Reino Unido y Gibraltar a través de los llamados encuentros ad hoc, y “continúe al mismo tiempo con estas incursiones”.