IAM/Redacción El delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, ha solicitado colaboración a la ciudadanía para hacer “lo más ágil posible” el paso fronterizo con Gibraltar, máxime tras la aplicación del nuevo código europeo de fronteras Schengen.
Así, ha reclamado a los ciudadanos que hagan uso de la frontera inteligente, en cuya implantación se han invertido siete millones de euros.En declaraciones a los periodistas en La Línea de la Concepción, Sanz ha comentado que la implantación de este nuevo código de fronteras ha conllevado que en los últimos días se haya contado con refuerzos policiales en la Verja y que se esté trabajando para hacer “cada vez más efectivo el sistema de frontera inteligente”.Ha destacado que el nuevo código apuesta por una mayor seguridad e implica que se incida en un mayor control desde el punto de vista documental. Ha argumentado que esto supone un avance positivo en materia de seguridad y también en materia de lucha antiterrorista, si bien debe tener “una actualización para evitar al máximo las repercusiones hacia el ciudadano”.
El delegado del Gobierno en Andalucía ha señalado que “hay que ser conscientes de que se trata de una reforma que procede de la Unión Europea”, matizando que “no es una decisión del propio país” y que “no está vinculada a ningún tipo de negociación” –en alusión al ‘Brexit’–. “Es sencillamente la puesta en marcha de la reforma del código de fronteras y que España, como miembro de la UE, tiene la obligación de desarrollar e impulsar”, ha recalcado.Sanz ha subrayado también que esto conlleva la reclamación de que “todos los medios técnicos que se ponen a disposición del ciudadano para agilizar el paso sean utilizados”. Así, ha insistido en pedir “máxima colaboración ciudadana” porque la frontera inteligente está instalada “para usarla”, por ser “fundamental para la seguridad y la agilidad” en el paso fronterizo.Por último, ha recalcado la necesidad de concienciación de los ciudadanos, a quienes ha pedido que lleven el pasaporte biométrico y el DNI electrónico en el caso de los españoles, ya que eso es “parte fundamental de que la frontera funcione y se haga un trabajo lo más ágil posible”.