El ministro se ha referido así, sin citarlo, al discurso de Cameron con motivo del National Day de Gibraltar, en el que ha afirmado que no negociará ninguna cesión de soberanía ni el inicio de un proceso de negociación sin el consentimiento de los gibraltareños. García-Margallo ha acudido al Pleno del Senado para responder a una pregunta del PP sobre la estrategia del Gobierno respecto al Peñón. Entre sus argumentos, el ministro ha esgrimido el del cumplimiento de las resoluciones de Naciones Unidas sobre Gibraltar, por las cuales, ha expuesto, el Reino Unido declaró no sentirse obligado. Esas resoluciones, ha citado Margallo, dejaron sentado que Gibraltar es un territorio “no autónomo” y “sujeto a descolonización” y en el que debe primar el principio de unidad territorial. También ha recordado que Naciones Unidas rechazó también el referéndum de 1967, instó a las dos naciones a “poner fin a la situación colonial” y a salvaguardar los intereses, “no los deseos”, de la población. “La actitud del Reino Unido, reiterada hoy por el primer ministro David Cameron, contraviene claramente estas resoluciones”, ha afirmado el ministro en el Pleno. García-Margallo ha asegurado que España, a diferencia del Reino Unido, sí se considera “obligada por esas resoluciones como se considera obligada por toda la legalidad internacional”. El ministro ha asegurado también que la política española con respecto a Gibraltar trasciende a un solo gobierno y será un asunto que se trate siempre previo acuerdo del Congreso y del Senado y en el marco de Naciones Unidas “o en los órganos jurisdiccionales competentes”, el Tribunal de La Haya, el Tribunal del Mar o el que corresponda en cada caso. Margallo ha explicado además que el Gobierno sigue condenando el foro tripartito en el que se situó en pie de igualdad a Gibraltar con España y el Reino Unido. Y ha citado a Mariano Rajoy en su etapa de diputado: “Equivale a si, en un litigio sobre propiedad, se diese al inquilino voz, voto y veto”. Por último, ha afirmado que se mantendrán los controles en la valla en cumplimiento de la legalidad europea, para controlar el contrabando, el blanqueo de capitales, evitar distorsiones ficales y proteger el medio ambiente.EL PSOE DE FELIPE GONZÁLEZ El ministro ha dirigido parte de su intervención también al PSOE. El jefe de la diplomacia española ha asegurado que el Gobierno se guía en este asunto de Gibraltar por una proposición no de ley socialista de 1985 en la que se defendía la integridad territorial española y se rechazaban intentos “unilaterales” de modificar el estatuto del Peñón. Y además, ha citado a Felipe González cuando afirmó: “El problema de Gibraltar tiene una solución lógica, la devolución a España de un trodo de territorio español”. “Espero que los correligionarios de Felipe González acompañen al Gobierno en esta senda”, ha dicho. Por otro lado, García-Margallo ha aprovechado su intervención para poner de manifiesto el “clamoros silencio” que a su juicio ha mantenido la Junta de Extremadura “en todo este asunto”.