La asociación de vecinos de La Ermita ha decidido dar un voto de confianza al alcalde, José Ignacio Landaluce, antes de emprender movilizaciones para reclamar que el Ayuntamiento recepcione la urbanización lo que conllevará a que se les preste todos los servicios públicos como al resto de las barriadas, caso de limpieza o alumbrado público, además de más vigilancia policial.
No habrá por tanto, movilizaciones ni manifestaciones en las calles. Así lo decidieron los vecinos en una asamblea celebrada ayer viernes.
El vecindario de esta zona, que engloba varias promociones de bloques de viviendas, asegura que lleva seis años siendo marginados ya que el Ayuntamiento no las recepciona argumentando que hay deficiencias en la urbanización que la junta de compensaciones debe subsanar. Las negociaciones entre ayuntamiento y junta de compensaciones no concluyen con un acuerdo que ponga fin al litigio y mientras tanto el consistorio no cubre los servicios, aunque los vecinos advierten que a ellos sí les cobra los impuestos.
Los vecinos de La Ermita están por tanto a la espera de una reunión con Landaluce, en la que le entregarán de forma oficial el listado de reclamaciones. Son partidarios de agotar la vía del diálogo antes de emprender acciones de protestas que, son conscienten, causarán molestias a muchos algecireños que no tienen culpa de este conflicto.
Este voto de confianza no significa que la asociación vecinal, que ya está constituida de forma oficial, baje la guardia en sus reivindicaciones. Por lo pronto, en la asamblea de ayer los vecinos decidieron contratar a un abogado, especializado en temas urbanísticos, ya que no descartan emprender acciones legales contra el Ayuntamiento y la junta de compensación.
