Nieto solicitó información al respecto tras la reunión en la que se constituyó el Comité de Coordinación Aeroportuaria de la Comunidad Autónoma de Andalucía, dada la preocupación suscitada con carácter general en cuanto a la destrucción de empleo, el empeoramiento del servicio público y la merma de la calidad de la oferta turística que, en general, trae aparejada la privatización de este servicio estratégico.
Precisamente ha sido la Consejería de Fomento y Vivienda la encargada de responder a Nieto confirmando las previsiones: “Como ya sucedió con procesos privatizadores anteriores de grandes empresas estatales como Telefónica, Repsol, Endesa o Gas Natural, la venta de AENA incidirá en un incremento de la cadena de subcontrataciones como consecuencia de las reestructuraciones de costes, una subida de tasas con consecuencias tanto para las compañías aéreas como para los pasajeros, y una pérdida de inversión en infraestructuras que podrían mermar la calidad y seguridad del servicio público”.
El helipuerto de Algeciras supuso una inversión por parte de AENA de 7 millones de euros, y la construcción de una heliplataforma sobre el aparcamiento del Puerto de 2.400 metros cuadrados. “Después de ser considerada como una línea estratégica por la propia AENA, el cierre de esta infraestructura nos colocaría injustamente en la lista del despilfarro económico de instalaciones como los aeropuertos de Ciudad Real, Castellón, Lérida o Corvera, que fueron fruto de una absoluta falta de planificación a la hora de decidir su construcción que nada tiene que ver con nuestro helipuerto”.
El helipuerto algecireño se inauguró en julio de 2010 y sólo ha funcionado, de forma continuada durante año y medio. Su actividad cesó porque la concesionaria argumentaba que la línea Algeciras-Ceuta no era rentable. Como consecuencia de ello, AENA ha incluido al helipuerto dentro de los que hay que adaptar y disminuir horarios, precisamente, por su escasa rentabilidad. Es, a criterio de la Junta de Andalucía, uno de los candidatos a cerrar sus operaciones inmediatamente después de la privatización.
Nieto apela a la condición de diputado de José Ignacio Landaluce para impedir el previsible cierre: “Los múltiples retrasos y problemas varios que han afectado al normal funcionamiento del helipuerto vienen a sumarse a sus problemas de viabilidad, lo que desembocaría en la clausura definitiva de las instalaciones cuando la rentabilidad económica se anteponga a cualquier otra valoración.
Esperamos desde Izquierda Unida que el Alcalde impida este nuevo revés para Algeciras, y que se pronuncie claramente sobre qué opinión le merecen las consecuencias sociales y económicas que Algeciras está padeciendo por culpa de la política errónea y mercantilista que el PP aplica a todos los servicios públicos”.
Nieto ha recordado que la ciudad ya viene perdiendo conexiones con otros puntos geográficos desde que el PP llegó al gobierno: “Tenemos menos conexiones y frecuencias ferroviarias con ciudades como Ronda, no llegan las inversiones para electrificar nuestra vía y con ello se sigue justificando su bajo potencial, y ahora podríamos perder el helipuerto.
Landaluce debería explicar qué hace como diputado para defender los intereses de la ciudad, que va perdiendo oportunidades sin que el Alcalde levante ni una leve protesta a sus compañeros de filas”.
