Mayo se inició con el anuncio del cierre del grifo por el delegado de Medioambiente de la Junta de Andalucía a la captación de aguas de los manantiales en las Corzas y Garganta del Gran Capitán que viene efectuando Emalgesa. Es sorprendente cómo con ello el corporativismo político puede hacer extraños compañeros de viaje.Y es que, en el pleno del pasado viernes se pudo apreciar cómo nuevamente se instó a la Junta de Andalucía a permitir de nuevo las captaciones sin considerar que tal denegación venía sustentada en una denuncia de los ecologistas de Agaden por la sobreexplotación de los manantiales.Para Juan Pedro Ávila, presidente de la Plataforma “Es curioso qué poco importa el estado de los arroyos, la pérdida de su biodiversidad o que no se aclare contablemente el ahorro que ha representado durante todos estos años dichas captaciones por parte de estos mismos políticos que han ejercido labores de gobierno”.“Nada se dice, nada se aborda del verdadero problema de la ciudad que no es otro que el estado de los colectores, el riesgo de inundación, el incremento desmesurado de las tasas de depuración, las emisiones de aguas residuales a nuestras playas,… Parece que este corporativismo político quiere escapar del debate público sobre la responsabilidad de quienes han determinado este estado de situación”, continúa.La Plataforma Cívica en Defensa de los Colectores se reitera en su solicitud de celebrar un pleno municipal extraordinario que aborde el tema del agua en su totalidad, solicita el mantenimiento de las captaciones en situaciones de sequía permitiendo un caudal mínimo medioambiental.Como consecuencia de que el Alcalde de Algeciras hace oídos sordos a la idea de afrontar el tema del agua públicamente, la Plataforma Cívica en Defensa de los Colectores se ve en la necesidad de convocar a los vecinos de Algeciras a una nueva manifestación que vuelva a mover conciencias a ver si en esta ocasión el alcalde se aviene a razones.La Plataforma argumenta la manifestación del próximo 31 de Mayo en las siguientes razones:· El recibo del agua está inflado de tasas ,ivas, y canones· Cobran un servicio de depuración que no se presta· El circuito de colectores no se encuentra conectado a la depuradora· Se cobra mejoras de saneamiento fijo y variable de unos colectores que no funcionan.· Las aguas residuales y pluviales están mezcladas y no reciben el oportuno tratamiento diferenciado, vertiéndose unas al mar contaminándolo y depurando aguas pluviales en otros casos sin necesidad y con el consiguiente coste energético.· La ciudad cuenta con más de 18.000 desempleados que no pueden afrontar los desproporcionados importes de los recibos· Los vecinos de muchas zonas de la localidad siguen teniendo miedo cuando llueve porque sus casas se inundan perdiendo cuanto poseen.· Las aguas para el baño en las playas soportan la contaminación de vertidos directos al litoral· Se paga infraestructuras y captación de aguas de titularidad pública de nuestros manantiales que se regala a empresas privadas que posteriormente cobra al ciudadano. Mientras tanto, desecamos nuestros arroyos y ponemos en peligro flora y fauna, porque no se mantiene un caudal mínimo medioambiental, perdiendo biodiversidad y la posibilidad de una explotación turística· Se cobra a los vecinos de Algeciras las aguas de manantiales al mismo precio de las que proceden del pantano de Castellar.Por todo ello solicita la Plataforma el apoyo ciudadano para revertir esta situación, expone Juan Pedro Ávila.