TCAM-ALGECIRAS/V.T.E.
Las dependencias de la delegación municipal de Bienestar Social, situadas en el Paseo de la Conferencia, recibieron el pasado martes, día 29, una visita de la Inspección de Servicios Sociales de la Junta de Andalucía, en la que se informó de que no tenía la documentación en regla al carecer de la licencia de funcionamiento. De tales hechos ha informada esta mañana en rueda de prensa la delegada de Bienestar Social, Paula Conesa, acompañada del teniente de alcalde delegado de Hacienda, Luis Ángel Fernández, que han aportado el acta de la inspección acreditativa de los hechos.Según indicó Conesa, la documentación con que se cuenta consiste en la comunicación del cambio de domicilio de la delegación, y de un expediente de finales de 2006 en el que se solicita una autorización previa, que queda pendiente a que se subsanen una serie de desperfectos. Todo ello quedaba finalmente vinculado a la realización de un proyecto en el que se solucionaban las deficiencias, que comenzó a realizarse pero se quedó paralizado. Al parecer, había un convenio de colaboración en el que se aclaraba que se concederían los permisos necesarios una vez concluidas las obras.Por otra parte, la delegada informó que curiosamente ese mismo día se recibió una llamada de la delegación provincial por la que se comunica que se va a proceder a la reclamación de un remante de un programa de refuerzo de atención al inmigrante, del año 2010, por importe de 8 céntimos. “Todos sabemos que la cosa está muy mal, pero tan solo la llamada tuvo un coste superior a esa cantidad”, manifestó la delegada, que indicó que no cabe más conclusión que el Ayuntamiento está siendo perseguido por la Junta por tener otro color político. “Ignoramos las consecuencias e intenciones, pero si solo tenía un carácter recordatorio, se podría haber hecho telefónicamente como es lo habitual”.