IAM/EP|La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha querido mostrar públicamente su apoyo a los exescoltas Miguel Guerrero y José Vega, que se encuentran en huelga de hambre frente a la prisión de Botafuegos (Algeciras) desde hace 18 y 15 días, respectivamente.Al mismo tiempo, instan a los responsables políticos a que cumplan con los compromisos adquiridos y le den una solución.En un comunicado, subrayan que estos trabajadores se encuentran cada día “en peores circunstancias”, ya que su salud va empeorando por día que pasa surgiendo problemas de tensión, pérdida de peso, trastornos en el sueño, comidas, etcétera, “un detonante para que en un futuro puedan sufrir posibles efectos secundarios dadas las circunstancias y la poca preocupación por parte del Gobierno Central”.Desde CSIF han reclamado una salida “digna” para estos trabajadores en paro y que por parte del Gobierno Central se tomen las medidas oportunas. Entre otras posibles, CSIF propone que para las plazas que se oferten de vigilantes de seguridad en las prisiones de España, “se garanticen los principios de igualdad de oportunidades, meritos y capacidad”. “Si se opta, como parece ser, por un servicio privatizado, estos principios han de primar igualmente y que cada uno de los interesados opte a ese puesto específico en igualdad de condiciones”, agregan.Lo que desde CSIF no ven razonable por parte de los políticos son posibles privatizaciones o externalizaciones de servicios públicos “en aras de presuntos beneficios personales y partidistas”.
