Se trata del mayor submarino de ataque de la Armada británica, sucesor de la clase Trafalgar y con una capacidad de 7.400 toneladas.El portavoz en el Campo de Gibraltar del grupo conservacionista Verdemar Ecologistas en Acción, Antonio Muñoz, ha advertido acerca de que este submarino “ha tenido problemas ya” y ha recordando que en octubre de 2010 encalló frente a una isla de Escocia.El ecologista ha querido “llamar la atención de todas las administraciones, porque esto es un peligro potencial no sólo para el medio ambiente, sino para la población de Andalucía y del Magreb. Es una bomba flotante”.Se trata del segundo submarino nuclear que recala este año en la Bahía de Algeciras, después de que en enero lo hiciera el HMS Tireless