Hasta el momento se han sentado nada más cinco de los seis acusados. El juicio contra los seis acusados por el hundimiento del pesquero Rúa Mar, ocurrido en enero de 2020 cuando supuestamente transportaba un alijo de drogas y dejando por el camino seis fallecidos, se reanuda este lunes en la sección de Algeciras de la Audiencia Provincial de Cádiz.
Cabe recordar que en la sala de vistas hasta el momento se han sentado nada más cinco de los seis acusados, ya que uno de ellos se encuentra en paradero desconocido y con una orden de búsqueda y detención al no presentarse en la prisión en la que estaba interno tras un permiso penitenciario hace varios meses.
La primera sesión del juicio, que comenzó el pasado 22 de septiembre, sirvió para resolver sobre aquellas cuestiones previas que se habían planteado, entre las que los letrados de la defensa pedían la nulidad de las intervenciones, los dispositivos de geolocalización y a su vez también la nulidad de las sonorizaciones, lo cual no fue estimado por la Sala, estimándolas inicialmente como válidas.
De igual forma, la Fiscalía incluyó a más perjudicados a los efectos de la responsabilidad civil y la indemnización que se deriva, que son aquellos familiares que no habían sido incluidos en el escrito inicial porque no se tenía constancia de los mismos.
Así, hasta el momento, las primeras sesiones han servido además de para que el tribunal acepte las intervenciones telefónicas realizadas durante la investigación y los acusados se acojan a su derecho a declarar al final del juicio, para que los policías que han declarado como testigos, entre los que se encuentra el instructor de la investigación, hayan ratificado los hechos como los relata la Fiscalía en su escrito de acusación en cuanto a la existencia de una organización dedicada al narcotráfico.
La Fiscalía, que ha destacado la «brillante labor» que han hecho en la instrucción y su desarrollo la Unidad de la Udyco Central, ha pedido para el armador del barco 114 años de prisión por los presuntos delitos de pertenencia a organización criminal (dos años), contra la salud pública (dos delitos a seis años cada uno), homicidio (seis delitos a 15 años cada uno), estafa (un año), contra el derecho de los trabajadores (tres años) y por blanqueo de capitales (seis años). Además, pide una multa de 3,9 millones de euros por los delitos contra la salud pública y cuatro millones por el de blanqueo de capitales.
Asimismo, pide 19 años de prisión para la pareja sentimental del armador, 13 años para dos acusados supuestamente encargados de coordinar el alijo y seis años para otros dos acusados relacionado con la droga.
Los hechos relatados por la Fiscalía explican que el armador del Rúa Mar ya estaba bajo vigilancia policial tras haber sido interceptado un alijo anterior, así como que la primera idea era utilizar otro barco de su propiedad para ese viaje, aunque finalmente se hizo en el Rúa Mar.
El barco zozobró la madrugada del 23 de enero de 2020 con seis tripulantes en su interior, sin que hasta el momento hayan aparecido ni el barco ni cuatro de ellos. El mar expulsó tres días después parte de los restos del ‘Rúa Mar’ muy lejos del punto donde supuestamente había naufragado el barco, y posteriormente la corriente hizo que aparecieran dos de los cuerpos pertenecientes a la tripulación, los días 27 y 28 de enero. El barco y cuatro de sus tripulantes quedaron en el mar.
Además, el día 26 de enero de 2020 sobre las 20,45 horas el Servicio Marítimo de la Guardia Civil hizo entrega de dos fardos de unos 25 kilogramos de hachís cada uno flotando en el mar, que transportaba, según la Fiscalía, el barco hundido.