Nadie puede escapar del estrés: No importa qué tan fácil pueda ser tu día, no importa qué tan preparado estés para el estrés que inevitablemente va a llegar. Es algo que todo ser humano enfrenta. Hoy nos concentramos en el aceite de CBD: Venta del cbd online en Justbob.
Y la verdad es esa misma, que no podemos evitarlo. Lo que sí podemos hacer -en lugar de resignarnos a sufrir- es armarnos de más y mejores métodos de aliviar nuestro estrés. Es muy importante aliviar, manejar, amortiguar el estrés, ya que este es cumulativo. Si no hacemos nada para sacarnos algo de nuestro estrés de encima, acabaremos cediendo bajo el peso de estrés acumulado.
Siempre están las típicas recomendaciones que te hacen reír por dentro. Haz ejercicio, dice tu amigo el que tiene buen cuerpo desde incluso antes de que empezara a ir al gimnasio. Come más vegetales, dice el que tiene tiempo de sobra para hacer compras y cocinar. Hazte un té de pata de conejo, dice tu amigo el que está completamente loco.
No te preocupes, no te vamos a dar consejos inútiles, sino que te vamos a presentar un remedio que es tan fácil de usar que te preguntarás por qué no lo usa todo el mundo: El aceite de CBD.
Qué es el aceite de CBD
Lo más obvio acerca de este aceite es que está hecho a partir de la planta de marihuana, las flores especialmente. Como cualquier aceite esencial vegetal, el aceite es extraído con maquinaria compleja: Tanto si es a presión como a vapor, estas máquinas extraen un aceite puro de la planta; La fuente de todas sus propiedades terapéuticas, nutritivas, etc.
El aceite de CBD es extraído de la variedad Cannabis Sativa, que es alta en CBD. Tomemos un momento para explicar qué es el CBD.
CBD o Cannabidiol
Este es un compuesto químico perteneciente a la familia de los Cannabinoides, un grupo de más de cien diferentes compuestos que pueden ser encontrados en la planta de Cannabis. El CBD es uno de los más estudiados igual que uno de los más importantes.
La razón por la que el CBD es tan importante es porque es la fuente de un gran número de efectos beneficiosos para la salud. El CBD actúa sobre nuestro cuerpo de muchas maneras: Aumenta la circulación, relaja los músculos, baja la inflamación e irritación, estimula nuestro apetito— los efectos son más de los que pueden ser contados. Pero, en resumen, el CBD ayuda a que te relajes.
En contraste encontramos el THC, o tetrahydrocannabinol. Este es el otro famoso cannabinoide: Se encuentra en mayores concentraciones en la variedad Indica de la planta de Cannabis, y su efecto es en gran parte mental. Se trata de una droga psicotrópica, que altera nuestra percepción de la realidad y nuestro humor. Se dice que el THC hace que encontremos las cosas más graciosas y que aumenta nuestra creatividad: Muchos artistas usan el THC como un medio para aumentar su creatividad y hacer así más -y mejor- arte, música, etc.
Cómo usar el aceite de CBD
Mencionamos antes que el CBD se encuentra en la variedad Sativa de la marihuana. Se hace imposible no preguntar entonces por qué no simplemente fumamos marihuana.
La razón es la misma por la que el aceite de oliva es considerado casi un elixir de vida mientras que las aceitunas, fuente de este aceite, no captan tanto la atención de los nutricionistas. En un pequeño frasco de aceite de CBD encontrarás el CBD más puro en mucha más concentración de lo que podrías en las flores que usas para fumar.
Aquí una pequeña guía de cómo usar el aceite de CBD:
Sé constante al usarlo. La razón por la que el doctor te dice que te tomes la medicina a cierta hora del día, todos los días, es porque todas las medicinas son más efectivas si son tomadas con cierta regularidad. Las indicaciones con el aceite de CBD suelen ser tres dosis al día: Desayuno, almuerzo, y una hora antes de acostarte.
Pequeños incrementos. La mayoría de los frascos de aceite de CBD vienen con un dosificador. Estos dispensan de gota en gota, lo que hace muy fácil para nosotros medir nuestra dosis diaria. Cada quien es diferente: Comienza con una gota por dosis y, después de unos días, auméntala. Sigue aumentando la dosis por una gota cada dos o tres días hasta que encuentres una dosis en la que sientas los efectos pero que no te relaje hasta tal punto que no puedas levantarte del sillón por dos horas seguidas.
Disfruta. Si te tomas una dosis y, acto seguido, te sientas a esperar a que surta efecto Lo más posible es que acabes más estresado que antes. En lugar de esto, toma tu aceite de CBD y planifica alguna actividad relajante.