Los traslados causan un déficit de casi 50 agentes en Algeciras y La Línea

Una vez más, los movimientos internos de personal en la Policía Nacional han tenido consecuencias negativas en las fuerzas policiales de las comisarías de Algeciras y La Línea. Según información obtenida por VIVA, este año se ha registrado un déficit de 47 agentes de calle y 19 oficiales como resultado de los traslados internos realizados entre ambas sedes. Esta situación se repite año tras año, debilitando progresivamente el cuerpo policial en la región del Campo de Gibraltar.

El alto nivel de trabajo y riesgo que implica formar parte de estas dos comisarías, vinculadas a la lucha contra el narcotráfico, la inmigración y grandes operaciones como la Operación Paso del Estrecho, es una carga adicional que no se ve reflejada en un mayor salario ni en mejores condiciones laborales o mayores oportunidades de promoción interna. Esto desanima a muchos agentes recién graduados a quedarse en la zona.

El secretario provincial del Sindicato Unificado de la Policía (SUP), Antonio Flores, expresó su preocupación ante estas cifras y señaló que “una vez más, van a tener que enviar a muchos agentes recién salidos de la Academia de Ávila para cubrir estos vacíos”. Según el SUP, el Campo de Gibraltar se ha convertido en un “destino de castigo” para estos jóvenes agentes o para aquellos que puedan ser enviados voluntariamente desde otras ubicaciones. Por tanto, el sindicato policial insiste en la necesidad de reclamar un régimen especial para los destinos en el Campo de Gibraltar, algo que vienen solicitando desde 2018. Estos beneficios salariales y de promoción, similares a los que existen en el País Vasco como resultado de la etapa más dura del terrorismo de ETA, garantizarían una mayor estabilidad en las plantillas. Esto no solo sería necesario para la policía, sino también para otras fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, Vigilancia Aduanera, sistema penitenciario, tribunales de justicia (jueces, fiscales, funcionarios), médicos y profesores.

De lo contrario, se perpetúa una situación en la que Algeciras y La Línea carecen de “una plantilla especializada” en aspectos tan complejos como el blanqueo de capitales, lo que obliga a traer agentes de otras ubicaciones, incluso unidades completas, como la Unidad de Prevención y Reacción de La Línea. Estos agentes a menudo llegan directamente de la Academia de la Policía Nacional de Ávila en comisión de servicio. “Pasamos dos años formándolos y luego se van”, enfatiza el representante del SUP, quien insiste en la necesidad de crear incentivos tanto económicos como técnicos.

La situación empeora con el inicio de la Operación Paso del Estrecho, el próximo jueves 15 de junio, para la cual “tendrán que traer personal de fuera”. El SUP había solicitado la convocatoria de 50 nuevas plazas, pero una vez más no se han cubierto, lo que implica traer a más personal en comisión de servicio. “¿Cómo podemos exigirle a alguien que venga de Barcelona a cobrar lo mismo y bajo las mismas condiciones?”, lamenta el representante sindical.

Este año, según el SUP, han quedado vacantes 16 plazas de oficiales y la misma cantidad de plazas de agentes en la comisaría de Algeciras, así como 31 plazas sin cubrir en La Línea, además de tres plazas de oficiales. El año pasado se produjo una situación similar, con la pérdida de 10 plazas entre suboficiales y oficiales, y 17 plazas de agentes solo en La Línea. En Algeciras, se quedaron sin cubrir 32 plazas.

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