“Caruana”, asegura Landaluce, “está manejando la realidad cuando intenta camuflar la relación entre Gibraltar y Reino Unido al margen de una relación colonialista. El único que no quiere escuchar, por los motivos que sean, que resulta evidente que se trata de justificar su política soberanista, es Caruana, que sigue insistiendo en llevar a cabo una política de acoso y derribo fuera de toda lógica que sólo sirve para tensar las relaciones, no ya sólo entre dos gobiernos, sino entre dos pueblos que están llamados a entenderse y que el Partido Popular defiende de manera conjunta por un desarrollo común en búsqueda del desarrollo económico y social de ambas comunidades”.
Landaluce ha agradecido el apoyo recibido por parte de miembros del Grupo Parlamentario Socialista en el Congreso de los Diputados, “que demuestra que aún existiendo posicionamientos diametralmente opuestos, la defensa de un argumento no puede en ningún momento incluir descalificaciones personales”.
“Caruana no ha dicho una sola palabra acerca de cómo está obviando, en primer lugar el tratado de Utrecht cada vez que acosa y expulsa a embarcaciones de la guardia civil; como también está despreciando las resoluciones de Naciones Unidas cuando se refiere a las relaciones que mantiene Gibraltar con el reino unido, unas relaciones que tienen un claro matiz colonialista”, se queja el diputado.
“La postura de Caruana es la de seguir insistiendo en sus pretensiones soberanistas, y para ello cuenta con el apoyo del Gobierno del Reino Unido, pero también tenemos que contar con un tercer actor en todo este conflicto, como es el Gobierno de España. Desde el PP no podemos por menos llamar la atención ante la postura del ministro español de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, que cuenta con el apoyo del presidente José Luís Rodríguez Zapatero”, añade.
“España va a perder la oportunidad que le brinda la Presidencia de la Unión Europea para velar por los intereses de nuestro país en relación con el contencioso”. Es más, continúa Landaluce, “ya tenemos pruebas de que nuestro país, en el ejercicio de su responsabilidad al frente de la Unión Europea, está echando balones fuera. Estas afirmaciones están avaladas por las últimas declaraciones de la presidencia de turno de la Unión Europea (UE), “que se mostró partidaria de que los veintisiete no intervengan en la crisis entre Argentina y el Reino Unido sobre las Islas Malvinas, al considerar que es un asunto “bilateral y no entre regiones. La Presidencia española de la UE entiende que este contencioso, “agravado en los últimos días por el interés del reino unido de llevar a cabo exploraciones petrolíferas, debe ser solventado a través del diálogo entre las dos partes implicadas. Pero la preocupación del PP viene tras haber conocido que el Gobierno de Madrid se ha posicionado diciendo que la UE no toma parte en otros contenciosos territoriales “como el de Gibraltar”, entre España y Reino Unido, o en los que afectan a algunos países de Iberoamérica”.En definitiva, concluye Landaluce, “desde el Partido Popular vamos a seguir, en primer lugar defendiendo los mismos posicionamientos que hemos defendido desde el primer momento y que, no sólo no reniegan de los tratados y acuerdos internacionales, sino que están avaladas por éstos. Por eso, y reiterando nuestra pretensión, vamos a continuar pidiendo que se abra el dialogo en relación con la soberanía, con la intervención de los gibraltareños, pero siempre cumpliendo la legalidad y sin renunciar a unos derechos históricos que Caruana pasa por alto”.