Ha sido el director del Gabinete de la Presidencia del Gobierno, don Iván Redondo, quien ha contestado por escrito a la carta remitida el pasado mes de agosto por el primer edil al presidente en funciones, invitándole a desplazarse hasta la ciudad para afrontar estas cuestiones. Redondo señala que confío en que comprenda que el actual calendario político no va a permitir al presidente realizar una visita en estos momentos a su comarca.
El director del Gabinete agradece a Landaluce que nos de la oportunidad de conocer de primera mano las inquietudes y necesidades que afectan a su ciudad, especialmente de infraestructuras, posibles efectos como consecuencia del Brexit y otras cuestiones que su Ayuntamiento considera de importancia para los intereses de los ciudadanos, de las que tomamos muy buena nota y de las que somos conscientes.
Para el regidor algecireño es comprensible que la agenda de un presidente del Gobierno, aunque sea en funciones, está repleta de actos, pero cuando hay cuestiones tan graves y que afectan a más de 350.000 personas, es necesario dar una solución, y si Pedro Sánchez no puede venir voy a convocar a todos los alcaldes del Campo de Gibraltar y de la Serranía de Ronda, si así lo estiman, para ir nosotros a Madrid y que nos reciba allí.
Dice que está en funciones y que no puede actuar en la línea ferroviaria de Algeciras, pero está en funciones y sí puede actuar en las infraestructuras y las inversiones de Valencia, Barcelona y Tarragona, y eso no casa. De ahí viene esta situación de desesperación y la exigencia de que debe tratarnos como ciudadanos de primera, no de tercera ni de cuarta, y seguiremos insistiendo para que nos den lo que en justicia nos merecemos. No pedimos más que nadie, sino incluso menos que en otras zonas de España, recalca la primera autoridad municipal.
Finalmente, el alcalde algecireño subraya que si lo que está pasando aquí ocurre en cualquier otro punto de España, la gente se planta, los medios de comunicación se ponen exigentes y los ciudadanos se organizan para crear una carta ciudadana exigiendo que nos den lo que nos merecemos.