Lo ha asegurado este miércoles el consejero de Economía, Rogelio Velasco, durante la presentación de estos incentivos en un encuentro telemático organizado por Cámaras Andalucía, en el que también han participado su presidente, Javier Sánchez Rojas; y los máximos responsables de las distintas cámaras que integran la red regional.
Velasco ha señalado que esta línea de subvenciones está destinada, con carácter general, a favorecer la transformación digital, la modernización y expansión del negocio y el relevo generacional de las pymes comerciales y artesanas.
Sin embargo, con el fin de minimizar las consecuencias negativas de la paralización de la actividad y de apoyar la recuperación de ambos sectores durante la desescalada, la Consejería ha ampliado los conceptos para acceder a los incentivos, de forma que puedan ser también subvencionables las inversiones relacionadas con la COVID-19.
En ese sentido, Velasco ha subrayado que con esta decisión, “se da respuesta a las nuevas necesidades y se facilita la reapertura de los negocios y la adaptación al nuevo escenario”.
Las ayudas, cofinanciadas con Fondos FEDER, pueden cubrir hasta el 100 % de la inversión planteada por la pyme dentro de los importes máximos establecidos para cada una de las cuatro modalidades previstas, que oscilan entre los 6.000 y los 42.000 euros.
Además, la orden de bases reguladora de esta línea permite anticipar las subvenciones íntegramente cuando la cuantía concedida sea igual o inferior a 6.000 euros.
Para los incentivos que superen esa cantidad, el abono anticipado será del 50 %, liquidándose el otro 50 % una vez que el destinatario haya justificado la realización del proyecto subvencionado y el gasto realizado.
De igual modo, el programa posibilita que una misma empresa pueda acceder a las cuatro tipologías de ayudas, pudiendo superar la subvención los 90.000 euros.
La norma que da sustento al programa fija cuatro modalidades de ayudas. La primera está dirigida a financiar proyectos de transformación digital, con los que se persigue mejorar la productividad y competitividad de las pymes comerciales y artesanas a través de las TIC y el comercio electrónico.
El segundo bloque engloba actuaciones de modernización del negocio con el objetivo de hacerlos más atractivos y captar nuevos clientes.
El tercer grupo se centra en la expansión de los negocios, y se financiará la apertura de un nuevo punto de venta comercial o un nuevo taller artesano, que podrá desarrollar la misma actividad o introducir algún tipo de variantes en su apuesta por diversificar la oferta, ofrecer nuevos servicios o implantar nuevas tendencias.
La cuarta modalidad pretende favorecer aquellas acciones tendentes a asegurar el relevo generacional y a dar continuidad a pequeñas empresas comerciales o artesanas que, de otro modo, se verían abocadas al cierre debido a la jubilación, la incapacidad permanente, el fallecimiento del titular u otra causa sobrevenida.
Al respecto, Velasco ha resaltado que es la primera vez que se contemplan subvenciones para esta finalidad.
Todas estas ayudas se convocarán en régimen de concurrencia competitiva, salvo en la categoría de relevo generacional.
Podrán ser beneficiarias de las subvenciones las pymes y autónomos que desarrollen su actividad comercial o artesana en Andalucía.
Velasco ha remarcado que el comercio y la artesanía constituyen dos de los sectores especialmente afectados por la crisis sanitaria de la COVID-19 y por el estado de alarma decretado el 14 marzo.
Así, según los últimos datos del Observatorio Económico de la Junta de Andalucía, el índice del comercio al por menor experimentó en marzo una reducción interanual del 14,6% (-15,4 % a nivel nacional).