El ministro de Deportes del Peñón, Steven Linares, ha hecho este anuncio en un comunicado “con el corazón pesado”, pero entendiendo que “cuando nos unimos a estos juegos, teníamos una responsabilidad mutua y con ideales para los niños que participaban, pero mirando hacia el futuro. Los valores que estos juegos una vez defendieron, en nuestro punto de vista, ya no se alinean con las necesidades y objetivos de Gibraltar”.
“En nuestra opinión, el espíritu por el que se crearon estos juegos ya se ha cunmplido, y continuar participando en ellos ya no sirve para cumplir nuestro propósito original”, ha manifestado.
Gibraltar formó parte de la fundación de los Juegos Deportivos del Estrecho en 1998, junto con Algeciras y Ceuta. Una inciativa que, debido a su éxito deportivo y social, y al acercamiento de los pueblos más allá de confrontaciones políticas, ha supuesto durante dos décadas uno de los mejores ejemplos de relaciones de buena vecindad en la zona.