IAM/Redacción Los sindicatos de estibadores y la patronal Anesco apuran el plazo, que vence hoy a las 13.00 horas, para responder a la propuesta sobre la reforma del sector planteada por el presidente del Consejo Económico y Social (CES), Marcos Peña, mediador en la negociación.
La Asociación Nacional de Empresas Estibadoras y Consignatarias de Buques (Anesco) celebraba ayer una asamblea, a la que asistieron todos sus asociados, para fijar su posición, aunque hasta hoy no comunicarán su decisión, según fuentes de la patronal.También la comisión negociadora de la parte social, liderada por la Coordinadora Estatal de Trabajadores del Mar (CETM) y de la que forman parte también UGT y CCOO, han acordado no desvelar hasta hoy mismo su decisión.Los sindicatos tienen previsto, además, celebrar esta semana, aunque la fecha aún no está cerrada, una reunión técnica con la comisaria europea de Transportes, Violeta Bulc, para que les explique los argumentos jurídicos que no permiten una subrogación por ley.
Con su propuesta, presentada el jueves pasado a ambas partes y al Gobierno, que ya la ha aceptado, el mediador quiere dar respuesta a los asuntos que han sido esenciales durante todo el proceso de negociación de la reforma del sector -a la que obliga una sentencia europea-: mantenimiento de empleo, mejora de la productividad y ayudas para los ajustes de trabajadores portuarios (más de 6.150).La propuesta del mediador llega después de que la patronal y los sindicatos consiguieran un principio de acuerdo sobre la reforma del sector, que, no obstante, fue rechazado por el Gobierno, por lo que los estibadores se preguntan qué sentido tiene cuando existe un pacto sectorial.A su juicio, una propuesta de mediación tiene su razón de ser para poder poner de acuerdo a las partes y, en este caso, ya lo han hecho.El ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, ha señalado que “no se puede hacer nada más” por parte del Gobierno, después de aceptar la propuesta del mediador, para precisar que no es la del Ejecutivo y que incluye “una serie de cuestiones que benefician a trabajadores y patronal”.
De la Serna ha defendido que el Gobierno fue “claro” en la reunión en la que se presentó el principio de acuerdo entre sindicatos y empresas, que “planteaba una obligación de subrogación que por ley no es posible” y que contenía un volumen de ayudas que “el Gobierno no puede asumir”.También ha destacado que el “extraordinariamente generoso” paquete de ayudas previsto para los procesos de reconversión es de 120 millones de euros, mientras que el planteamiento de los empresarios lo elevaba hasta los 2.450 millones, cálculo que Anesco considera “erróneo”.También el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se ha referido a la reforma de la estiba, al vaticinar que “se aprobará tarde o temprano”, según ha trasladado a los medios el vicesecretario de Comunicación del PP, Pablo Casado