Según ha explicado la Policía Nacional en una nota, el primero de los hechos, y en labores de prevención y represión de las actividades aparejadas al aprovisionamiento de combustible y las tareas de logística propias de las organizaciones dedicadas al tráfico de drogas, los agentes del Grupo de Atención al Ciudadano y de las Unidades de Prevención y Reacción procedieron a la aprehensión de 2.400 litros de gasolina en tres actuaciones.
Este combustible, de alto poder inflamable, se encontraba oculto en el interior de una finca sin adoptar ninguna medida de seguridad para su almacenamiento. En este sentido, la Policía ha reiterado la necesidad de evitar almacenar en viviendas y fincas tales cantidades de combustible, ya que se trata de un líquido con alto nivel y riesgo de explosión en caso de ser ubicado en pequeños lugares sin ventilación.
Además, en la madrugada del domingo, los agentes del Grupo de Atención al Ciudadano en un dispositivo de prevención realizado localizaron tres todoterrenos preparados para transportar estupefaciente que se encontraban sustraídos en diferentes localidades de la península los cuales fueron recuperados.
Directamente relacionado con esa actuación se encuentra la posterior localización e incautación de una “narcolancha”, abandonada a la altura de la playa de la Urbanización Alcaidesa que portaba tres motores y cuyos ocupantes lograron darse a la fuga.
