En declaraciones a los periodistas Marín, que ha explicado que la ley de extranjería obliga a las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado a dejar en libertad a los inmigrantes en un plazo de tres días, ha detallado que este jueves fue “tenso y difícil” en estas negociaciones con el Ejecutivo de Pedro Sánchez.
“Hay que habilitar espacios para que estas personas que den positivo puedan estar confinadas al menos hasta que salgan adelante y no sean portadores del virus”, ha dicho Marín, que ha recordado que las competencias en esta materia son del Gobierno de la nación, aunque la Junta se ha ofrecido a asumirlas.
Ha detallado que la labor que compete al Ejecutivo andaluz en estos momentos es “la posibilidad de coordinar estas políticas”, para lo cual ha reclamado medios, y ha añadido que ha puesto a disposición del Gobierno centros de Inturjoven en Almería y Cádiz para atender a los inmigrantes con la colaboración de la Policía Nacional y la Guardia Civil para custodiar estos centros.
“Lo que no podemos nosotros es invadir competencias que no son nuestras ni labores que no pueden realizar otras fuerzas y cuerpos de seguridad que no sean las del Estado”, ha insistido Marín, que confía en cerrar un convenio con el Gobierno “en las próximas horas” para que sea “una herramienta para poder controlar esta situación”.
Al margen de estos casos, el vicepresidente andaluz ha asegurado que los rebrotes de la COVID-19 están “controlados” y que la situación “no es preocupante” ya que el programa “centinela” de la Junta está activo en todos los centros de la comunidad y en los 33 distritos sanitarios andaluces.