Tal y como ha explicado el responsable provincial de este sector en Cádiz, Alberto Puyana, se trata de una cifra elevadísima, que irán en aumento en los próximos días, y que supone un grave problema para todos, pues este colectivo es el que trabaja en primera línea para preservar la salud y la vida de la población afectada en estos difíciles momentos.
Así, CSIF ha reclamado que sin más demora se facilite a los profesionales los medios de protección necesarios para frenar esta preocupante propagación del virus entre el personal que trabaja en los centros sanitarios de la provincia.
Según la información con la que cuenta CSIF, el Hospital Puerta del Mar de Cádiz, cuenta con más 200 profesionales en aislamiento domiciliario (positivos más sospechosos de serlo). En el Hospital de Jerez, hay 43 profesionales en cuarentena, y el Distrito Sanitario Bahía de Cádiz-La Janda (centros de salud de la comarca), también con 43. Luego está el Hospital Punta de Europa (Algeciras), con 11 trabajadores en cuarentena, 6 en el Área Sanitaria del Campo de Gibraltar, cuatro en el Hospital San Carlos (San Fernando), dos en el Hospital de La Línea, y uno en el Hospital Puerto Real. Hay que recalcar que los datos varían a cada momento, que la Administración facilita la información con cuentagotas y con cierto retraso, y que esta estimación suma tanto a los profesionales que han dado positivo como los que están en aislamiento a la espera de resultados.
Puyana denuncia el sentimiento de desamparo, impotencia y frustración que tienen en estos momentos los profesionales de la salud, ante la falta de elementos de prevención para evitar el contagio del virus. Los profesionales están desbordados y haciendo un esfuerzo titánico para responder a esta emergencia con una enorme profesionalidad y entrega, mantiene.
El sindicato subraya, además, que muchos de los trabajadores y trabajadoras del sistema sanitario público han tenido que recurrir a elaborar sus propios equipamientos de protección totalmente artesanales. Los profesionales necesitan disponer de los elementos básicos para la protección de su salud, la de sus familias y la de la ciudadanía a la que atienden y en eso las autoridades sanitarias les están fallando, ha concluido.
Además, Puyana alerta de que si los recursos materiales de protección no llegan a tiempo, el personal que venga a sustituir a los profesionales en cuarentena domiciliaria van a acabar contagiándose igualmente.