En una nota, la Policía ha recordado que estos incidentes tuvieron lugar cuando los servicios sanitarios trasladaron a un total de 28 personas de la tercera edad desde la localidad de Alcalá del Valle hasta la residencia linense. Los ancianos, afectados en su mayoría por Covid-19 fueron recibidos por varios vecinos, que trataron de impedir su llegada, cortando varias calles a la circulación del tráfico rodado, empleando para ello barricadas y lanzamiento de objetos de distinta consideración.
Los actos dieron comienzo cuando dos de los detenidos, que se desplazaron con su vehículo a las inmediaciones de la residencia con el objeto de obstaculizar el traslado de los pacientes, se enfrentaron a las dotaciones policiales desplegadas, colocando el coche en mitad de la calzada a modo de barricada.
Tras grabarse con sus teléfonos móviles, hicieron un llamamiento a la ciudadanía a través de redes sociales y empleando una aplicación de mensajería instantánea, al objeto de que secundaran su boicot a la decisión de las autoridades sanitarias.
Además, varios vecinos de las inmediaciones salieron a sus terrazas para increpar a las dotaciones policiales y expresar su desacuerdo con el ingreso de los ancianos. Minutos más tarde, y en respuesta a la convocatoria, decenas de personas salieron a la calle, cortando el tráfico rodado y estableciendo barricadas, tal y como se desprende de las declaraciones de los agentes desplazados hasta el lugar.
Tras momentos de una elevada tensión, la actuación de los miembros de la Brigada de Seguridad Ciudadana posibilitó el restablecimiento del orden público y el retorno a la normalidad. Con este, son nueve los detenidos en este lamentable episodio, los cuales cuentan en su mayoría con antecedentes por tráfico de sustancias estupefacientes, todos ellos viejos conocidos por su relación con el mundo del narcotráfico.
No obstante, la Policía ha recordado que al margen de los hechos, han sido muchas las muestras de afecto y solidaridad protagonizadas por instituciones y vecinos de la ciudad, haciendo un poco más agradable la recuperación de los mayores, entre los que se encuentra Ana, de 107 años, recién recuperada de la enfermedad y que ya había pasado la gripe española de 1918.