Según ha indicado la Policía en una nota, la red organizaba desde España la salida de las embarcaciones con la ayuda de colaboradores en Marruecos, de donde procedían la mayoría de los inmigrantes quienes, una vez en España, pagaban entre 500 y 600 euros por ser trasladados en vehículo a otras zonas.
La investigación se inició cuando fue localizada una patera en una playa gaditana, además de diversas prendas y utensilios abandonados. Con posterioridad fueron detectados tres hombres en relación con la patera hallada, quienes además fueron recogidos en un vehículo por uno de los investigados.
Tras dichas observaciones, los agentes establecieron dispositivos de vigilancia y seguimiento, constatando la existencia de una organización criminal encargada de introducir de manera clandestina a inmigrantes, normalmente de origen magrebí, a las costas españolas en embarcaciones de recreo tipo patera con la intención de trasladarles a otras zonas de las provincias de Almería y Málaga y, una vez allí, ser alojados en domicilios o locales controlados por los investigados.
El trabajo de los agentes determinó además que dos de los investigados realizaban actividades relacionadas con el tráfico de sustancias estupefacientes a pequeña escala. Cada uno de los miembros ocupaba un rol y estaban perfectamente organizados, de manera que los integrantes de la red se encargaban tanto de la recogida de los traficados en las costas españolas, como del cobro de la tarifa por el traslado en vehículo, así como del alojamiento temporal en domicilios o locales de su propiedad.
Tras la llegada de los inmigrantes se producían los traslados, principalmente a Almería y Málaga cobrando entre 500 y 600 euros
por dicho traslado en vehículo.
La Policía ha señalado que la organización perseguía un fin eminentemente lucrativo, logrando obtener grandes cantidades de dinero con esta actividad anteponiendo en todo momento el beneficio económico por encima de las seguridad de las personas. Además, ha destacado las condiciones pésimas e insalubres de los lugares en los que eran alojados los inmigrantes por la organización.
En el operativo han sido detenidos seis presuntos miembros de la red criminal por un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros y organización criminal, dos de los cuales también han sido detenidos por delito contra la salud pública. Asimismo, se han llevado a cabo tres registros en diferentes provincias andaluzas, interviniéndose en los mismos varios teléfonos móviles, 4.700 euros en efectivo, diversa documentación y un vehículo.