El presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, ha expresado su esperanza de que los países con superávit de la Unión Europea ayuden a los países con problemas de endeudamiento a fin de generar el clima de confianza necesario en los mercados, y ha advertido, en ese sentido, de que el “gran problema” en estos momentos es la crisis de deuda soberana que padecen países como España e Italia.
Durante un encuentro con medios de comunicación hispanos, Obama ha declarado que los dirigentes europeos deberían buscar una política económica común y la puesta en marcha de un conjunto más efectivo de políticas fiscales que permitan afrontar los problemas de deuda soberana. En este sentido, el mandatario señaló –citado por la agencia mexicana Notimex– que, si bien existe una moneda común, el euro, “no existe un juego común de políticas económicas y eso crea dificultades”.
El “mayor problema”, prosiguió, ocurrirá si los mercados de capital continúan huyendo de “grandes países” como España e Italia. Para paliar ese problema, advirtió, los países con superávit deberían ayudar al resto de naciones en crisis, lo cual, advirtió, contribuiría a recuperar la confianza en los mercados.
Asimismo, Obama aseguró que su Gobierno, en colaboración con la Unión Europa y el Fondo Monetario Internacional (FMI), trabajan en la creación de un paquete “que pueda dar a esos países tiempo para ajustarse”. No obstante, advirtió, por mucho que Estados Unidos se involucre en la búsqueda de una solución, ésta deberá surgir de los propios miembros de la UE.