IAM/Redacción Cada vez es más palpable el progreso en calidad que demuestra el póker español.
Se está convirtiendo en una situación habitual el hecho de que los jugadores nacionales dominen los mejores torneos que se disputan en nuestro territorio y que a menudo coloquen a algunos de sus representantes en los puestos de cabeza de las grandes citas internacionales, algo que hasta hace apenas unos años era poco menos que excepcional.La pasada semana echaba a andar la 7ª temporada del ESPT, que este año consta de tres etapas, celebrando su primera parada en Madrid. El circuito de póker más prestigioso de nuestro país reunía como es habitual a la mayor parte de los mejores jugadores nacionales y a un buen número de extranjeros que se acercan al calor de los premios.
La victoria fue para el leonés Pablo Gordillo que se impuso al granadino Sergio Cabrera en el mano a mano final.Estos torneos se juegan por eliminación durante dos o tres jornadas hasta quedar solo ocho jugadores supervivientes que pelean por los mejores premios en la llamada mesa final. Un dato a tener en cuenta es que en esta mesa final del ESPT de Madrid todos los jugadores eran de nacionalidad española. Con las eliminaciones de este último día y tras quedar en pie los más fuertes de la ocasión, el leonés y el granadino pactaron repartirse los premios en metálico de forma proporcional a su situación de ventaja en la partida, algo habitual en los torneos, antes de reanudar el juego en busca del desenlace final.
Esta vez el título de campeón fue para Gordillo con un premio en metálico de 69.846€ y el segundo lugar con 78.444€ fue para Cabrera, que curiosamente obtuvo una recompensa superior al ganador gracias a su posición de ventaja en el momento del pacto.
Este popular circuito de póker echó a andar allá por abril de 2010 celebrando su primer gran evento en el Casino Torrequebrada de Málaga. Aquel primer torneo que habría un ciclo nuevo en el póker español fue a parar a manos del valenciano Vedast Sanxis y curiosamente un algecireño llamado David López terminó en un destacado tercer lugar. Desde entonces hasta ahora el póker español no ha hecho otra cosa que crecer y los jugadores y torneos se multiplican a cada paso.
El algecireño David López en el ESPT
Hay que tener presente que la irrupción del póker online supuso una revolución en este mundillo cambiando el punto de vista que hasta ese momento muchos tenían de este juego. En la actualidad son multitud las personas que se preparan concienzudamente para desarrollar esta actividad y muchos de ellos incluso van un paso más allá y la convierten en su profesión.
Atrás quedaron aquellos años en que este tipo de cosas se consideraban propias de individuos de baja catadura moral para pasar a ser jóvenes con un nivel intelectual medio-alto, en gran número universitarios y con un buen manejo de la estadística y las matemáticas, los que se han tornado en protagonistas y que en mayor medida dominan el panorama mundial del póker.
Los amantes del póker españoles no son ajenos a esta tendencia y ya no es una sorpresa ver algunos de ellos abrirse paso entre las grandes estrellas internacionales, caso del joven madrileño de 21 años Adrián Mateos que en la actualidad se encuentra en el Top 20 del ranking GPI de los mejores jugadores del mundo.
Adrián Mateos
El mencionado torneo de Madrid también nos confirma que “la roja” cuenta con numerosos recursos para hacer algo grande en el póker. El próximo junio el Estrellas Poker Tour se dirigirá a Andalucía para celebrar su segunda parada que tendrá lugar en el Casino Marbella como es habitual cada año y veremos si en esa ocasión podemos celebrar de nuevo una buena actuación de un jugador algecireño como la de hace 6 años.