Los técnicos del Centro de Gestión del Medio Marino de la Junta (CEGMA, ubicado en Algeciras) han confirmado que la ballena varada el pasado fin de semana en la playa de Torreguadiaro en San Roque es un rorcual tropical (Balaenoptera edeni), una especie de ballena muy poco frecuente en la zona, de ahí su interés científico. El ejemplar, de casi 7 metros de longitud total, presentaba un avanzado estado de descomposición lo que impidió que se le realizase una necropsia.Los técnicos del CEGMA han explicado que la distribución de esta especie se limita a las aguas tropicales y subtropicales de los oceános Atlántico, Pacífico e Índico, y las Islas Canarias son la única zona de Europa en las que se pueden observar con frecuencia ejemplares de esta ballena. Por ello el gran interés que despierta a la comunidad científica que estudian los cetáceos, ya que podría significar cambios en la distribución habitual de la especie.Este es el segundo registro que se tiene de esta especie en el área del Campo de Gibraltar. El primero fue en 2010, se trataba de un ejemplar de unos 13 metros de longitud y que en un primer momento se pensó que se trataba de un rorcual común (Balaenoptera physalus), especie más frecuente en estas aguas. Tras el análisis genético de muestras de grasa y músculo que se tomaron en su día, y que fueron analizadas por personal de CIRCE (Conservación, Información y Estudio sobre los cetáceos) con los que la Junta colabora, se pudo confirmar que también se trataba de un ejemplar de rorcual tropical.