La Cámara Baja del Parlamento indio ha aprobado una ley por la que se endurecen los castigos, incluso mediante la pena de muerte, contra los violadores. Se trata de una nueva secuela de la violación y asesinato de una joven estudiante en Nueva Delhi, perpetrada el pasado mes de diciembre y que ha generado fuertes movilizaciones en favor del endurecimiento de las leyes.
La nueva ley contra las violaciones fue propuesta por el Gobierno el pasado mes de febrero y aprobada ayer martes por la Cámara Baja después de siete horas de debate. Ahora deberá pasar por la Cámara Alta para su aprobación parlamentaria definitiva, según ha informado la BBC.
Según la prensa india, la Cámara estaba prácticamente vacía en el momento de la votación de la ley, a pesar del compromiso previo de los partidos de apoyar las enmiendas. Entre los ausentes destacaron la presidenta del partido del Congreso Nacional Indio, Sonia Gandhi, de su hijo y vicepresidente del partido, Rahul Gandhi, y de algunos ministros.
La nueva ley impone la pena de muerte para los casos de violación que concluyan con el fallecimiento o con el estado vegetativo de la víctima y duplica la pena mínima de cárcel –de diez a veinte años– para las violaciones en grupo, las perpetradas contra menores de edad y las cometidas por agentes de Policía o por cualquier otro miembro de las autoridades, que pueden ser castigadas hasta con cadena perpetua sin posibilidad de remisión.
“Ha llegado la hora de que se envíe un mensaje claro, fuerte y disuasorio de que la sociedad no tolerará este tipo de comportamientos”, ha declarado el ministro del Interior, Sushilkumar Shinde.