El Tribunal General de la Unión Europea (TUE) ha rechazado el recurso del ministro principal, Peter Caruana, contra la el dictamen de Bruselas de inscribir como espacio protegido español la zona marítima conocida como «Estrecho Oriental» para que forme parte de Natura 2000, según publica el diario La Razón. Apoyado, una vez más, por Gran Bretaña, Caruana pretendía que fueran los tribunales europeos los que anularan esta decisión, según Ep. El argumento, el mismo de siempre. La zona en disputa incluye, bajo criterio gibraltareño, aguas territoriales británicas de Gibraltar y una zona de alta mar.
En el recurso arguyen que la Comisión «incurrió en errores manifiestos de derecho» porque «designó una zona de un Estado miembro, aguas territoriales británicas de Gibraltar, como si formasen parte de otro Estado miembro, a saber, España». Según fuentes diplomáticas consultadas por LA RAZÓN, el triunfo que supone para la tesis española es «muy importante porque se trata de la primera vez que un tribunal europeo se va a tener que enfrentar con la cuestión de las aguas territoriales».
El auto fechado el 24 de mayo reconoce ímplicitamente (tal y como argumenta Gibraltar) que «es la competencia española la que rige en las citadas aguas», según las mismas fuentes. Caruana ya anunció ayer que va a recurrir ante el Tribunal de Luxemburgo el revés que le ha infligido el TUE. En un comunicado, advirtió de que «Gibraltar no permitirá en ninguna circunstancia que las aguas territoriales británicas sean tratadas, administradas o gobernadas para la UE o para cualquier otro objetivo de una forma que no sea como aguas de soberanía exclusiva británica».