El Servicio de Vigilancia Aduanera (SVA) ha intervenido alrededor de ocho toneladas de cocaína que han sido localizadas en el interior de un contenedor en el puerto de Algeciras. La incautación se ha producido como resultado de una investigación de una organización criminal dedicada al tráfico de estupefacientes entre Sudamérica y Europa utilizando este puerto español. Aunque no se han revelado otros detalles al respecto, podría tratarse de la llamada Operación Pampa por la policía de Ecuador, que ha conllevado, en dicho país y en España, la detención de 29 individuos relacionados, en mayor o en menor medida, con la mafia albanesa.
Tal y como informa “Campo de Gibraltar Siglo XXI”, en el caso de Algeciras, el operativo sigue abierto. Según ha trascendido, tras tener conocimiento de que se iba a producir el transporte de un cargamento de droga, según anticipó el diario ABC, los efectivos del SVA iniciaron un seguimiento que concluyó con la apertura de un contenedor en el puerto algecireño. La droga viajaba en el interior de una caja metálica que había sido construida en el interior del contenedor para tratar de burlar los controles aduaneros.
Se trata del mayor cargamento de cocaína incautado en el puerto de Algeciras, tras que, el pasado mes de agosto, otra operación de Vigilancia Aduanera junto a la Policía Nacional permitió la incautación en sus terminales de 9,5 toneladas de cocaína, todo un récord a escala estatal, que los agentes destacaron como un «golpe histórico» al narcotráfico, ya que superaba las 8,7 toneladas que se aprehendieron en 2018 en otra operación.
El Servicio de Vigilancia Aduanera, dependiente de la Agencia Tributaria, mantiene abierta una investigación para detener a los miembros de la organización investigada por este cargamento.
Al otro lado del Atlántico, la Policía Nacional de Ecuador detuvo a al menos 29 personas en un operativo simultáneo realizado en España y en Ecuador contra la mafia de Albania por presunto narcotráfico y lavado de dinero de al menos 30 millones de dólares, en un dispositivo conjunto del que ya dio cuenta ayer este digital.
Entre los detenidos en la operación denominada ‘Pampa’ hay 18 personas en Ecuador y 11 en España de nacionalidades ecuatoriana, española, argentina, colombiana y china, por su presunta vinculación con operaciones de envío de cocaína producida en Colombia a Europa a través de su embarque en puertos de Ecuador, con destino a puertos españoles como los de Algeciras, Valencia y Barcelona.
Se trata, como ya dio a conocer el ministerio español de Interior, de una investigación de dos años y medio, que implicó el registro de 42 inmuebles, de ellos 33 en territorio ecuatoriano y nueve español, donde se incautaron un total de 22 vehículos, 8 armas, 27 teléfonos celulares y 10 dispositivos electrónicos, así como una cantidad de dinero en efecto aún por determinar.
La Policía ecuatoriana ha ofrecido algunos datos nuevos. Por ejemplo, que el líder de esta organización es el albanés Dritan Gjika, vinculado al empresario ecuatoriano Rubén Chérres, a quien el año pasado asesinaron después de que se revelara una investigación policial donde se apuntaba al entramado empresarial que mantenía presuntamente con esta red de narcotráfico y lavado de dinero.
Chérres también estaba implicado en la presunta trama de corrupción en empresas públicas que tenía como aparente cabecilla a su amigo Danilo Carrera, cuñado del entonces presidente Guillermo Lasso (2021-2023).
Según las investigaciones policiales, el albanés realizaba los pedidos de droga a los laboratorios productores de cocaína Colombia y coordinaba en Europa la venta de la mercancía, con el apoyo de varias personas que le ayudaban al transporte de la droga hasta la frontera con Ecuador. Luego la droga era trasladada por carretera a varios centros de acopio en las provincias ecuatorianas de Cotopaxi, Los Ríos y Guayas donde se almacenaba en grandes cantidades antes de ser introducida en manera subrepticia en cargamentos de plátanos que se exportaban en buques rumbo a Bélgica, Países Bajos, Turquía y Albania.
La Policía de Ecuador sostiene que esta organización “contaba con información privilegiada sobre documentos marítimos de comercio exterior, lo cual les facilitaba la contaminación de varios contenedores semanales”.
“Gracias a su perfil de empresarios exitosos, lograban ingresar a territorio ecuatoriano a través de sus empresas el dinero procedente de la venta del alcaloide en Europa”, apuntó la Policía.
La Policía ecuatoriana logró rastrear el movimiento del dinero en el sistema financiero de Ecuador, mediante varias personas naturales y jurídicas que adquirieron varios bienes muebles e inmuebles con el fin de blanquear un total de 30 millones de dólares.